Figueres parte con más opciones que Palomero en la Acadèmia

La actual presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Ascensión Figueres, parte con más opciones que el vicepresidente Josep Palomero para alzarse con la presidencia en el pleno de la institución que tendrá lugar el próximo viernes. En ambos casos parece estar asegurada en la junta directiva del ente normativo una mayoría que no cuestiona la unidad lingüística, pero Figueres cuenta con más apoyos.

Ayer concluyó el plazo de presentación de candidaturas a la presidencia y a los cuatro puestos de la junta directiva, sin que saltara la sorpresa. De modo que Figueres, del PP, y Palomero, del PSPV, se disputarán la presidencia para los próximos cinco años del ente normativo, integrado por 21 académicos.

Figueres parte con más opciones porque, aunque la Acadèmia no reproduce aritméticamente la representación de los partidos políticos, los designados por el PP suelen guardar una mayor disciplina de voto. Las simpatías y antipatías personales, no obstante, desempeñan un papel nada desdeñable.

Los académicos designados por el PSPV se reunieron este verano y algunos representantes del Institut Interuniversitari de Filologia Valenciana (IIFV), como Rafael Alemany, expresaron la conveniencia de que un universitario presidiera la Acadèmia con el fin de despolitizar la institución. Se propuso el nombre de Manuel Pérez Saldaña. Pero no hubo unanimidad y se evidenció una división que hacía muy difícil la elección de un candidato.

La presidenta ha mantenido contactos con académicos que proceden del IIFV, que podrían apoyarla a cambio de garantizar una mayoría unitarista en la junta directiva y una serie de actuaciones programáticas, por ejemplo, el cumplimiento del dictamen sobre la lengua aprobado por la Acadèmia. En este escenario, el profesor Pérez Saldaña sería el vicepresidente y Verónica Cantó, la secretaria, siendo Ramon Ferrer, profesor universitario y miembro de la secesionista Real Academia Valenciana de la Llengua, uno de los vocales.

Todos ellos han formalizado sus candidaturas para los respectivos cargos, así como Honorat Ros y Àngel Calpe (secretarios) y Josep Lluís Domènech (vocal).

Por otro lado, se incide desde un sector en que se podría dar el caso de que algunos de los académicos más abiertamente críticos con Figueres, sobre todo a raíz de la virulenta polémica del dictamen lingüístico, la votara el viernes.