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Alto el fuego en Oriente Próximo

Las tropas españolas verificarán la retirada del Ejército israelí del sur de Líbano

España dirigirá una de las dos brigadas de la ONU, integrada también por fuerzas asiáticas

Verificar la retirada completa del Ejército israelí será una de las primeras misiones del contingente español que ayer desembarcó en Tiro, según fuentes de la Fuerza Interina de Naciones Unidas para Líbano (FINUL). La zona de Taibé, feudo de Hezbolá, donde llegó anoche la primera columna, con 20 vehículos y casi 200 infantes de marina, está junto a la frontera israelí, cerca de las localidades de Kfar Kila y Markaba, escenario de algunos de los más duros combates en la reciente guerra entre la milicia chií e Israel.

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Fuentes de la FINUL indicaron ayer que el Ejército israelí se ha retirado de algunas posiciones en las últimas 48 horas, pero aún quedan zonas ocupadas cerca de la frontera. Con la llegada de los 560 soldados españoles, el número de cascos azules ronda los 5.000, cifra que Israel consideró el mínimo necesario para retirarse. La misión española será comprobar el repliegue y ayudar al Ejército libanés a tomar las posiciones evacuadas.

La tarea se complica tras la polémica surgida por el tendido de una alambrada fronteriza por parte israelí que, según las autoridades libanesas, se adentra en su territorio. Observadores de la ONU, con equipos GPS, están comprobando la denuncia.

El coronel Luis Meléndez, jefe de la Fuerza Expedicionaria de la Infantería de Marina, estaba ayer pendiente de entrevistarse con el general francés Alain Pellegrini, jefe de la FINUL, que no acudió a recibir a las tropas españolas, al contrario de lo que hizo con las italianas el día 2.

Un par de días

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El batallón español debe alcanzar su capacidad operativa inicial en un par de días, cuando está previsto que se produzca la transferencia de mando a la FINUL, y la definitiva el 26 de septiembre. Por una vez, las fuerzas españolas están entre las primeras en llegar. Debido a la urgencia, la ONU ha excusado al contingente español (y al italiano) de que sus vehículos vayan pintados de blanco, aunque ya lucen las siglas de la organización.

Ha sido la FINUL, según las fuentes consultadas, la que ha asignado al batallón español la zona de Taibé, cuya cobertura se consideraba prioritaria. En esta primera fase de la operación, la ONU contará con tres nuevos batallones (aportados por Francia, Italia y España), que se suman a los dos ya existentes (Ghana e India). El área bajo responsabilidad española ocupará la mitad del territorio del batallón indio, mientras que Francia e Italia estarán en la zona asignada a Ghana y en el triángulo de Tiro, que amplía la franja de seguridad hasta el río Litani.

En la segunda fase, que debe arrancar el 1 de noviembre, la FINUL contará con ocho batallones, agrupados en dos brigadas. De la brigada liderada por España, con cuartel general en Marjayún, dependerán cuatro batallones aportados por España, India, Nepal e Indonesia, según fuentes de la ONU. Será, pues, una brigada hispano-asiática.

Otros países europeos (como Polonia, Finlandia o Portugal) pondrán unidades de apoyo logístico e ingenieros, pero no batallones. Bélgica, que participó en las reuniones de constitución de la brigada, estará finalmente en la brigada franco-italiana, con el batallón de Ghana. Las negociaciones, en todo caso, no han terminado y quedan aspectos por despejar, como la ubicación del contingente turco, si finalmente dicho país participa en la misión.

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