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Una de las víctimas de la supuesta asesina de ancianas sufre un ataque de ansiedad

Una de las víctimas de la presunta asesina de ancianas de Barcelona sufrió ayer una crisis de ansiedad al encontrarse cara a cara con Remedios S. S. en el juzgado y fue incapaz de prestar declaración, según fuentes judiciales. La anciana, que sobrevivió porque su atacante se marchó creyendo que estaba muerta, compareció ayer en el Juzgado de Instrucción número 16 de Barcelona en calidad de testigo, aunque no pudo soportar la presión de declarar y rompió a llorar. Ni siquiera el psicólogo del Servicio de Atención a la Víctima que la acompañaba pudo consolarla.

Quien sí pudo testificar ante el juez y reconocer a Remedios S. S. fue Montserrat F., la última anciana a la que ésta engatusó para que le abriera la puerta de casa. La presunta homicida le contó que llevaba un paquete para una abogada que vivía en la escalera y le pidió que la dejara ir al baño. Al ver que tardaba en salir, Montserrat fue a ver qué pasaba y la presunta homicida la atacó con una toalla mojada y un objeto contundente. Creyendo que estaba muerta, cogió su tarjeta de crédito y se marchó.

Ayer también compareció ante el juez el marido de una de las víctimas que sobrevivieron a la agresión. El hombre estaba en casa cuando Remedios S. S., presuntamente, abordó a su mujer en la entrada del piso. Al oír que ésta pedía auxilio, el hombre acudió en su ayuda y golpeó en la cara a la presunta homicida.

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