Tres mujeres que sobrevivieron a las agresiones de la presunta asesina de ancianas reconocen a la acusada

Tres de las cinco mujeres que sobrevivieron a la actuación de Remedios Sánchez Sánchez, la presunta asesina de ancianas, rememoraron ayer en el juzgado los hechos ocurridos el pasado mes de junio, cuando supuestamente fueron agredidas y estuvieron a punto de morir. Una de las testigos, Pilar Solà Falgar, reconoció a la acusada "sin ninguna dudas", mientras que María Rosario Márquez Vázquez y María Salud Mateu Valls la identificaron sin tanta certeza y admitieron que ya habían visto su imagen por televisión, según explicaron fuentes judiciales. Remedios Sánchez está acusada de la muerte de cuatro ancianas y de otros cinco asesinatos en grado de tentativa, así como de nueve robos.

De las tres historias humanas la más sobrecogedora es la de Pilar Solà, quien declaró ante los Mossos d'Esquadra y ayer se ratificó que Remedios Sánchez logró entrar en su vivienda el pasado 25 de junio haciéndose pasar por una empleada de la compañía del gas con el pretexto de realizar una revisión porque el día anterior se había producido una fuga. En el interior de la vivienda la golpeó en la cara e intentó escapar, pero finalmente fue alcanzada por la acusada por el cuello con una bufanda con la intención de ahogarla. A consecuencia de la agresión, la víctima perdió la conciencia.

En el caso de María Rosario Rodríguez, fue abordada en el ascensor de su vivienda el 22 de junio y conducida a su vivienda, donde la agresora le colocó también un objeto al cuello con la intención de ahogarla. Perdió la conciencia y sufrió contusiones en la cabeza, pero también salvó su vida. La agresión a Maria Salud Mateu Valls es de la que se conocen menos detalles.

Josep Maria Cusí, abogado defensor de Remedios Sánchez, explicó al acabar las declaraciones que dos de las tres presuntas víctimas reconocieron como propias las joyas que les mostró el juez y que presuntamente habían sido robadas por su clienta.