Una comisión tripartita velará por la seguridad de La Vallesa

El bosque de La Vallesa, la pieza central del futuro parque natural del Turia, ha sufrido tres incidentes desde que comenzó el proceso para declararlo parque natural, a finales de julio. Los tres han estado relacionados con los cables de alta tensión que lo atraviesan. El primero quemó algo más de una hectárea de pinos y matorral tras la caída de un cable de la eléctrica Iberdrola. El segundo afectó a unos 3.000 metros cuadrados de bosque tras la caída de un cable de Red Eléctrica de España. El tercero, ocurrido el martes, no provocó ningún incendio. Pero las chispas generadas por otros dos cables provocaron la movilización preventiva de seis brigadas de bomberos, que pasaron varias horas a su lado vigilando su evolución.

Una comisión integrada por la Consejería de Territorio, el Ayuntamiento de Paterna -cuyo término municipal abarca más de la mitad del bosque- y las eléctricas se constituirá la semana que viene para garantizar la seguridad de La Vallesa, indicaron ayer fuentes de la Generalitat. El objetivo es que la formación de pino carrasco, situada a apenas 12 kilómetros de la ciudad de Valencia, pase con la mayor tranquilidad posible los cuatro meses que faltan para que sea declarado parque natural.

Investigación mixta

La Coordinadora en Defensa de los Bosques del Turia pidió paralelamente la creación de una "comisión mixta de investigación" para aclarar los tres incidentes provocados por las líneas de alta tensión. La comisión debería estar integrada, en su opinión, por representantes de Territorio, de las compañías eléctricas y de la propia coordinadora. El movimiento ciudadano, que engloba a cerca de una veintena de asociaciones, reiteró ayer sus sospechas de que detrás de los incidentes se encuentran oscuros intereses inmobiliarios y especulativos. Una posibilidad no descartada por la consejería, que carece, sin embargo, de pruebas en esa dirección.

Fue un incendio, el que en el verano de 1994 arrasó 150 hectáreas del bosque y obligó a desalojar a 3.000 personas de sus casas, lo que llevó a los vecinos de las poblaciones cercanas a La Vallesa a fundar la coordinadora.

Fuentes de Iberdrola aseguraron ayer que las chispas generadas el martes en dos cables propiedad de la compañía y de Red Eléctrica de España no entrañaron ningún riesgo de incendio. Se trató de un "efecto lumínico" poco excepcional, afirmaron, causado por la combinación de la humedad del bosque y el polvo acumulado en los cables. Debido a la alarma social generada en torno a La Vallesa, la compañía procedió a sustituir los aisladores por otros hechos de composite, un material menos propenso a generar chispas pero igual de seguro, según Iberdrola.

El consejero de Territorio, Esteban González Pons, anunció hace un par de semanas que obligará a las eléctricas a soterrar los cables o a sacar su trazado de La Vallesa.