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Touriño afirma que los incendios de agosto "colapsaron el sistema" creado por el PP

PSdeG y BNG deciden que la investigación parlamentaria se haga en una "comisión de estudio"

Xosé Hermida

El presidente de la Xunta, el socialista Emilio Pérez Touriño, sostuvo ayer ante el Parlamento autónomo que el principal error de su política contra los incendios forestales ha sido mantener el dispositivo de extinción creado por sus antecesores, del PP. Touriño reconoció que el sistema organizado por los ejecutivos de Manuel Fraga "dio ciertos frutos en años anteriores", pero añadió que "se colapsó al enfrentarse a una situación excepcional y de extrema gravedad" como la oleada de fuegos que devastó casi 80.000 hectáreas en Galicia entre los días 4 y 15 del pasado agosto.

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El curso parlamentario se abrió en Galicia con la tensión al máximo por lo que se adivina un asunto de largo recorrido: el debate sobre la respuesta de la Xunta a la avalancha de incendios que en sólo 12 días de agosto superó todos los registros históricos. Touriño se sometió por primera vez a un enfrentamiento directo con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien le atacó con severidad, pero también tuvo que escuchar un duro rapapolvo del presidente de la Xunta.

Feijóo, que comenzó su discurso enunciando los nombres de las cuatro personas muertas en los incendios, defendió que el Gobierno autónomo no supo reaccionar ante el desastre porque su presidente es "el político más soberbio de Galicia". Touriño, mucho más sarcástico y vehemente que de costumbre, zarandeó al líder del PP por su "actitud patética" durante la crisis, plasmada en su fotografía apagando un fuego con una manguera, de la que Feijóo se disculpó desde la tribuna parlamentaria.

Touriño, con el apoyo sin fisuras de los portavoces socialista y nacionalista rechazó la exigencia de responsabilidades políticas. Feijóo trató de abrir brecha entre los dos partidos del Gobierno y acusó al presidente de dejar solo frente al fuego al consejero de Medio Rural, el nacionalista Alfredo Suárez Canal. Pidió la dimisión del consejero por considerarlo "responsable directo del mayor desastre ecológico de los últimos 16 años en Galicia". "¿Qué tiene que pasar entonces para que dimita un conselleiro?", argumentó.

Pero el presidente no va a destituir a nadie. Entiende que la devastación no se produjo como resultado "de ninguna decisión del Gobierno". Frente a las acusaciones del PP de que la magnitud del desastre es consecuencia de haber "desmantelado" el dispositivo del Gobierno anterior (PP), asumió como "autocrítica" que "el problema ha sido exactamente el contrario": Conservar un sistema que la oleada "sin precedentes" de agosto "llevó a su agotamiento".

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El presidente admitió "ciertos logros a ese modelo", basado en "un amplio dispositivo con rápida capacidad de respuesta", pero también "en la resignada aceptación de la fuerte intencionalidad incendiaria". "El sistema no redujo el número de incendios, porque esa cifra está asociada a la prevención y la intencionalidad, y así lo certifican las estadísticas: en los dos últimos años se registraron más de 60.000 incendios", apuntó.

También Feijóo sacó a relucir su arsenal de cifras y recordó que en lo peor de la crisis afirmó que la situación estaba "bajo control". El líder popular defendió la tesis de que en los 12 fatídicos días de agosto no hubo más incendios que otros veranos. El problema, según el PP, es que el promedio de hectáreas destruidas por cada fuego ha pasado en un año de 2,3 a 14 por la "incompetencia" del actual Ejecutivo. Feijóo esgrimió un comunicado de la Consejería de Medio Rural para afirmar que se redujeron las cuadrillas de extinción en un 34% y criticó que se hubiese cambiado el sistema de reclutamiento de sus miembros para introducir criterios "de oficina administrativa". Sin embargó, obvió cualquier referencia a que entre los requisitos para ser contratados se incluyese la posesión del un certificado de conocimiento del gallego, un asunto que, en plena oleada de incendiaria, suscitó duros ataques de la dirección nacional del PP.

Una de las acusaciones que más enfureció a Touriño fue la de que su Gobierno no actuó con "transparencia". El presidente contraatacó con otro episodio embarazoso para Feijóo: La difusión de un informe erróneamente atribuido a la NASA que cifraba las hectáreas quemadas en 175.000. Llamó "astronauta" al líder del PP y le acusó de "mentir y alarmar". Feijóo también trató de ridiculizar a Touriño como jefe de un "Gobierno en vacaciones".

En el pleno, la coalición de socialistas y nacionalistas bloqueó la solicitud del PP para crear una comisión de investigación sobre los incendios. PSdeG y BNG sostienen que es suficiente una "comisión de estudio", constituida el pasado lunes, en ausencia del PP, para indagar sus causas y consecuencias.

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Sobre la firma

Xosé Hermida
Es corresponsal parlamentario de EL PAÍS. Anteriormente ejerció como redactor jefe de España y delegado en Brasil y Galicia. Ha pasado también por las secciones de Deportes, Reportajes y El País Semanal. Sus primeros trabajos fueron en el diario El Correo Gallego y en la emisora Radio Galega.

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