El PSPV advierte del peligro de suprimir la presa de Vilamarxant

Los alcaldes socialistas implicados en el parque natural del Turia pedirán mañana al consejero de Territorio, Esteban González Pons, que se replantee la supresión de la presa de Vilamarxant. Una obra a la que se atribuye la "importante misión" de evitar inundaciones en el convenio acordado entre el ex presidente de la Generalitat Eduardo Zaplana y el Ministerio de Medio Ambiente en 1997.

La infraestructura, planteada por primera vez poco después de la riada de 1957, fue retomada por los gobiernos del Partido Popular, que la incorporaron al Plan Hidrológico Nacional (PHN). La llegada de los socialistas a la Moncloa y la derogación parcial del PHN no afectó a la presa. La redacción del proyecto fue adjudicada el año pasado a la empresa Ayesa. El presupuesto total alcanza los 73 millones de euros. La declaración del parque natural choca con otras obras previstas, como el segundo by pass o la carretera CV-50.

En la única reunión informativa sobre el parque, celebrada hace un mes y a la que sólo se convocó a los alcaldes y ediles del PP de las poblaciones por las que discurrirá el espacio protegido, González Pons señaló que la presa era incompatible con el proyecto. El consejero pidió al Gobierno "imaginación para solucionar el tema". El parque se extenderá desde Quart de Poblet hasta Pedralba remontando el Turia por ocho términos municipales, entre ellos el de Vilamarxant.

El alcalde de L'Eliana y secretario socialista de la comarca de Camp de Turia, Josep Maria Àngel, adelantó que los socialistas acudirán mañana a la reunión con el consejero "con todo el recelo del mundo". "La presa no aparece por la voluntad de un partido", aseguró Àngel, "y de la misma manera que varios gobiernos han determinado su importancia para prevenir avenidas basándose en estudios técnicos, cualquier decisión debe tomarse con seriedad. Llegar y decir que se va a suprimir sin examinarlo previamente es frívolo".

En términos parecidos se han expresado los alcaldes del PSPV de Paterna, Francisco Borruey, y de Quart de Poblet, Carmen Martínez, que asistirán a la reunión.

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Valencia, Rafael Rubio, que no está convocado, afirmó que la idea de González Pons deja a los habitantes de la ciudad y de la comarca de L'Horta "a la intemperie y sin un instrumento básico de defensa". Los valencianos, añadió "todavía tienen en la retina las consecuencias de la riada de 1957". Rubio reprochó el silencio de la alcaldesa Rita Barberá y, recordando el acuerdo de 1997, aventuró: "Quizá el jefe del Consell [Francisco Camps] piense que hay que olvidarse de ese convenio porque lo firmó Eduardo Zaplana al frente de la Generalitat con la entonces ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino".

La propia Consejería de Territorio, dirigida todavía por Rafael Blasco, hoy consejero de Sanidad, paralizó el año pasado una urbanización en Benaguasil por coincidir con el emplazamiento de la presa. Y el carácter "fundamental" de la obra para prevenir inundaciones fue destacada por el alcalde del PP de Losa del Obispo y presidente de la Comunidad General de Regantes del Camp de Turia, Benjamín Aparicio Cervera, en su comparecencia, hace un par de meses, ante la comisión especial para el estudio de la sequía de las Cortes.