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Una lista infinita de películas en el buzón

Daniel Verdú

No hace falta ni moverse de casa. Un cliente se suscribe al plan de tarifa plana. Hace una lista de películas. Cuantas quiera. Los DVD le empiezan a llegar aleatoriamente de tres en tres. Cada película va envuelta en dos sobres; el primero se tira, y el segundo sirve para envolverla en el momento en que se manda a través de cualquier buzón. Cuando el cliente ha devuelto la película que tenía, le llega otra. Así funciona, en líneas generales, la empresa Mediaxpress (www.mxp.tv). Un videoclub online que se sirve de la red de correos española para llegar a la casa de cualquier socio. Y a toda España.

"Tenemos hasta a un farero que vive en el lugar más recóndito del país. No tiene que moverse de ahí y cada semana tiene sus películas", explica el director de mercadotecnia de la empresa, Antonio Rodríguez.

La idea original es de la empresa estadounidense Netflix. En el país norteamericano el correo funciona de una forma más que fiable y el servicio resulta de una gran eficacia. Por si acaso, en España, Mediaxpress utiliza en ciudades como Madrid o Barcelona mensajeros que van de puerta a puerta para evitar los imprevistos. Disponen de más de 6.000 títulos y unos 5.000 abonados.

"Lo bueno de este tipo de videoclubes es que podemos ampliar el fondo de forma infinita. No tenemos el límite de capacidad de la estantería del videoclub tradicional", explican.

Mediaxpress tiene un fondo de películas comerciales, pero también apuesta por títulos independientes o de cine clásico. "La película más vista ha sido Bowling for Columbine, que no es precisamente comercial", arguyen desde la empresa. ¿Piratería? "Nuestros clientes buscan un cine que no se encuentra en el top manta y que no es habitual descargarse de la Red".

Dentro de poco este empresa piensa montar también un videoclub totalmente online en el que, como ya realizan otras compañías, podrán descargarse las películas de una forma totalmente legal.

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Algunos videoclubes convencionales, como Séptimo Arte, también están empezando a utilizar servicios parecidos, y ofrecen a través de su página en Internet la posibilidad de alquilar online y que un motorista lleve las películas a casa. Como si fueran una pizza.

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Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona en 1980. Aprendió el oficio en la sección de Local de Madrid de El País. Pasó por las áreas de Cultura y Reportajes, desde donde fue también enviado a diversos atentados islamistas en Francia o a Fukushima. Hoy es corresponsal en Roma y el Vaticano. Cada lunes firma una columna sobre los ritos del 'calcio'.

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