E.ON se muestra abierta a negociar con Industria las condiciones sobre la OPA

El presidente de E.ON, Wulf Bernotat, aseguró ayer que no tiene intención de elevar su oferta por Endesa, pero que podría estudiarlo si el Gobierno diera luz verde a la operación y se viera en una pugna directa con Gas Natural. "Entonces tendríamos que entregar nuestra oferta máxima en sobre cerrado y esto podría llevarnos a reconsiderarlo. Pero aún no hemos llegado a esa fase", declaró Bernotat. La alemana estaría dispuesta a negociar con el Ministerio de Industria sobre las condiciones impuestas por la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para la compra de Endesa.

"Entre las 19 condiciones, hay alguna que otra que en principio podemos aceptar", declaró Bernotat. Sin embargo, la CNE vincula su autorización al cumplimiento de todas las condiciones sin excepción. "Lo que más nos molesta es la obligación de desprendernos de activos [de centrales eléctricas y del negocio en las islas]. No hay que descartar que se puedan encontrar otras soluciones. En el recurso de alzada hay posibilidades de hablar sobre las condiciones con el Ministerio de Industria, y nosotros estaríamos dispuestos a ello", concluyó el presidente.

En realidad, en derecho administrativo español, el trámite de recurso de alzada es escrito y no contempla la posibilidad de ofrecer concesiones al recurrir una resolución como la de la CNE.

El presidente de E.ON también se refirió al precio de su oferta por Endesa. "No tenemos motivo para elevar nuestra oferta. La consideramos proporcionada y justa, y es mucho más alta que la de Gas Natural", insistió Bernotat, ayer, en una conferencia telefónica con motivo de la presentación de sus resultados hasta junio. Pero esa negativa es a corto plazo. Bernotat dejó abierta la puerta a una futura mejora, que los inversores dan por descontada. La oferta actual de E.ON es de 25,40 euros y las acciones de Endesa cerraron ayer en Bolsa a 26,80 euros, y eso pese a las incertidumbres sobre la operación.

Bernotat se mostró optimista: "Seguimos otorgando a esta transacción una gran importancia y contamos con que podremos cerrarla satisfactoriamente", aclaró, y no espera que el proceso se dilate eternamente en batallas judiciales. "Somos conocidos por perseguir nuestros objetivos con perseverancia, lo hemos demostrado en otras adquisiciones que también fueron muy complicadas y lo haremos también en este caso", contestó a una pregunta sobre la medida de su paciencia.

Bernotat volvió a señalar las ventajas para E.ON que tendría la adquisición de la eléctrica española. "Endesa es importante para nosotros porque nos da acceso a nuevos mercados con índices de crecimiento mayores de los que tenemos en Europa central. España crece alrededor de seis veces más que Alemania en el terreno de la electricidad; Latinoamérica e Italia, también", dijo.

Bueno para Europa

En referencia a los riesgos que conllevan las subidas del precio del petróleo, Bernotat consideró que "sólo grandes empresas energéticas pueden negociar con los proveedores de materias primas de igual a igual. Si los riesgos mundiales crecen, Europa necesita empresas energéticas de anchos hombros". Por eso, añadió Bernotat, la adquisición de Endesa no sólo es buena para E.ON, sino también para Europa.

La compañía E.ON tiene previsto continuar creciendo a base de adquisiciones. Bernotat señaló ayer que el mercado británico sigue siendo atractivo para su compañía, pese al fracaso el año pasado de la compra de Scottish Power. En esa ocasión, E.ON retiró su oferta tras un largo tira y afloja porque no llegó a un acuerdo sobre el precio.

La compañía presentó ayer unos buenos resultados correspondientes al primer semestre, periodo en que registró un aumento de su resultado bruto de explotación (Ebitda) del 12%, hasta 6.296 millones de euros. En cuanto al resultado operativo, el ascenso fue del 13%, hasta los 4.836 millones. Los beneficios de la mayor compañía energética privada de Europa se redujeron un 7% debido a que la venta de Ruhrgas Industries, proveedor de maquinaria y servicios, recayó en el primer semestre de 2005, alterando la cuenta de beneficios. Depurada de este efecto, la suma de los beneficios se disparó en un 32%, de 2.163 a 2.847 millones de euros.

La eléctrica E.ON facturó en los primeros seis meses un 31% más que en el mismo periodo del año anterior, alcanzando la suma de 36.915 millones. Unas cifras que indignan en Alemania en vista del abuso de las grandes eléctricas de su posición privilegiada a pesar de la liberalización del mercado. La compañía anunció que ha pedido al Gobierno autorización para elevar los precios al consumidor.