Bilbao se replantea los conciertos de Aste Nagusia tras un nuevo fiasco

Y ya van dos. El grupo Madness, anunciado por el Ayuntamiento de Bilbao como sustituto de los también británicos The Prodigy en el principal concierto programado para la Aste Nagusia, confirmó ayer su imposibilidad de acudir a la cita por "problemas personales" de su teclista. Ahora, a apenas cinco días del chupinazo que abre las fiestas bilbaínas, el consistorio intenta hallar una nueva opción "digna", aunque reconoce que las posibilidades son escasas y que el macroescenario de Botica Vieja puede quedarse vacío el día 24. Ante esta situación, el Ayuntamiento se está replanteando el modelo de conciertos de Aste Nagusia.

En sólo cinco días, Bilbao ha pasado de aguardar a dos grupos internacionales de relieve para el principal concierto de las fiestas de la ciudad a no contar con ninguno y tener cada vez menos posibilidades de lograrlo. Los esfuerzos del concejal de Cultura, el peneuvista Jon Sánchez, y de su equipo se centran ahora en conseguir cerrar otro nombre "digno y de calidad" para esa fecha, aseguró ayer el edil en una rueda de prensa convocada para explicar las circunstancias de la retirada y de la inicial suspensión del concierto de The Prodigy.

El consistorio anunció el pasado día 10 al grupo británico de ska Madness como sustituto de The Prodigy, pero al final tampoco acudirán a Bilbao por "problemas personales" de su teclista. The Prodigy decidió cancelar su actuación cuando la noticia se publicó en prensa antes de la fecha establecida en el contrato para que fuese anunciada. Sánchez precisó ayer que el contrato se cerró en junio y establecía en una cláusula que el Ayuntamiento no haría pública la actuación hasta el 16 de julio. Sin embargo, la promotora musical Last Tour International, responsable de la contratación de los dos grupos, sostuvo en un comunicado leído por su responsable de prensa, presente en la comparecencia al lado del edil, que la ausencia de The Prodigy se debe a "un problema de agenda del grupo".

Con Madness no se había firmado aún un contrato, pero existía su compromiso verbal de que estarían presentes en Bilbao. El consistorio supo ya el día 11, apenas 24 horas después de anunciar la presencia de la banda de ska, que su actuación se caía también, aunque se pospuso el anuncio de esta nueva cancelación hasta ayer "para dar margen a la promotora para que inicie otros contactos", dijo Sánchez.

Encontrar un grupo para el concierto del día 24 resulta ahora "prácticamente imposible", reconoció el concejal de Cultura. "No tenemos muchas posibilidades", afirmó, pese a que su departamento baraja dos o tres nombres, que no anunciará "sin compromiso escrito". En estos momentos, el consistorio no descarta la posibilidad de que esa noche Botica Vieja no cuente con ninguna actuación.

Esta sucesión de acontecimientos ha llevado al consistorio a replantearse el modelo musical de las fiestas y, como ya dejó entrever el alcalde, Iñaki Azkuna, el viernes, renunciar a las contrataciones de artistas de renombre internacional para que den conciertos gratuitos en Aste Nagusia y desviar esta demanda de la ciudad al Bilbao Live Festival.

Críticas de la oposición

El concejal ahondó en esta dirección y recordó que "el tan mentado concierto de artista internacional es un fenómeno reciente", impulsado tras el éxito de Manu Chao en las fiestas de 2001.

Los grupos de la oposición municipal criticaron frontalmente la gestión de Sánchez y su equipo. "Lo que ha pasado lo venimos denunciando desde hace tres años", declaró a este periódico el portavoz socialista, Txema Oleaga. "Existe un interés de filtrar la información por encima de la comisión de fiestas para lograr un rédito político, porque parece que el segundo concierto [Madness] también se ha suspendido por una filtración", aseguró. El PSE hizo un llamamiento a los ciudadanos para que disfruten de las fiestas y, después, "con más calma", solicitará "una reunión extraordinaria" para exigir responsabilidades.

El portavoz popular, Antonio Basagoiti, destacó "la nefasta gestión" de Cultura. "Lo que está ocurriendo es una de las mayores incapacidades en estos últimos años, porque estamos hablando del concierto principal, el que espera la gente", indicó.

Sánchez sostuvo que en los últimos tres años sólo se han caído del programa dos conciertos (Don Omar el año pasado y ahora The Prodigy), pero en 2003 los poco conocidos Rinôçérôse sustituyeron, también a última hora, a Primal Scream.