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Otegi afirma que difícilmente habrá paz si una parte está "acosada"

Maribel Marín Yarza

El portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, compareció ayer en San Sebastián en una rueda de prensa sin derecho a preguntas para dar un nuevo toque de atención al Ejecutivo español. "Difícilmente se puede construir un proceso de paz si una de las partes implicadas es permanentemente acosada", dijo. "¿A qué está jugando el Gobierno? Los ataques tienen que acabar. No se puede jugar con la esperanza de la gente".

Hacía poco más de media hora que cinco dirigentes de su formación ilegalizada declaraban en la Audiencia Nacional ante el juez Baltasar Garzón. Y Otegi, visiblemente enfadado, denunció que los miembros de Batasuna no pueden estar permanentemente sometidos a citaciones, yendo a firmar a las comisarías y con sus casas hipotecadas. ¿Alguien cree que es posible construir nada positivo desde la agresión permanente?, se preguntó. Y llamó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a la responsabilidad y al respeto. "Así no se puede" construir un proceso de paz de bases sólidas. Hay que "buscar un acuerdo que pueda hacerlo posible", sentenció. Durante su intervención, primero en euskera y luego en castellano, no hizo ninguna alusión a la marcha del domingo en San Sebastián.

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