La Guardia Civil ofrece recompensas para aquellos que denuncien a los pirómanos

La Guardia Civil ofrece protección a los testigos que puedan informar sobre la autoría de los incendios que queman Galicia, así como recompensas, para fomentar la colaboración ciudadana en la investigación de estos casos, según declaró ayer el director general del instituto armado, Joan Mesquida. Mesquida no quiso precisar a cuánto podrían ascender estas recompensas. "La investigación de incendios provocados es especialmente difícil porque las pruebas quedan muy deterioradas", explicó Mesquida, por lo que "es fundamental la colaboración ciudadana".

Esa colaboración debe darse "en todas las formas que ustedes se puedan imaginar: desde la posibilidad de testigos protegidos, hasta el ofrecimiento de cantidades (económicas) para perseguir a los responsables de la provocación de estos incendios", agregó Mesquida en una rueda de prensa en la localidad mallorquina de Algaida. El director del Instituto Armado destacó "el enorme esfuerzo" que realiza este cuerpo para determinar las causas que motivan los incendios, así como para "poner a disposición de la Justicia" a quienes los provocan.

Mesquida señaló que tras reunirse el pasado martes con el vicepresidente de la Xunta gallega, Anxo Quintana, y el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, sobrevoló desde Santiago de Compostela a A Coruña y llegó a la convicción de que "la mayor parte de los incendios son provocados" y calificó de "exagerada" la situación que vive Galicia, donde los incendios superan las peores previsiones de la Guardia Civil.

Ayer tarde, guardias civiles detuvieron en Boiro (A Coruña) a un leñador, J. M. L. T., de 41 años, y vecino de este municipio, como supuesto autor de al menos tres incendios forestales en la zona del monte Irioite, según un portavoz de la Guardia Civil. Éste informó de que al detenido, que fue trasladado al cuartel de Noia, se le imputa la comisión de dos incendios registrados el 23 de julio y el 6 de agosto pasados, así como otro ocurrido hace un año en esta zona. La Guardia Civil asegura que el arresto de este supuesto pirómano fue consecuencia de la colaboración ciudadana.

Por otra parte, otro de los detenidos en los últimos días como sospechosas de ser los autores materiales de algunos de los incendios forestales en Galicia fue encarcelada por orden del juez de Negreira (A Coruña). Se trata de R. S. C., de 36 años, que fue visto por varios ciudadanos prendiendo fuego con un mechero en una zona de la localidad de Paredes, perteneciente al municipio de A Baña. Ese fuego, que arrasó siete hectáreas, se inició el pasado día 7.

R. S. C., arrestado también gracias a la colaboración ciudadana, negó todas acusaciones, pero la fiscal encargada del caso solicitó al juez que lo encarcelara. El pasado martes fue enviado a prisión José A.R., de 59 años, otro supuesto pirómano detenido por causar fuegos cerca de Santiago.

Otro detenido, J. T. M. O., de 35 años, que padece algún tipo minusvalía psíquica, quedó ayer en libertad con cargos tras haber prestado declaración ante el juez después de haber sido sorprendido in fraganti cerca de un incendio registrado en el monte Carrio, donde ardieron el pasado viernes 300 hectáreas de arbolado y pastos.

Al margen de las pesquisas, unos 100 agentes antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía llegados de Barcelona, Madrid, Valencia, Castilla-la Mancha y Castilla y León empezaron ayer a realizar controles en carreteras próximas a núcleos urbanos de la región, según un mando policial. Además de estos efectivos, han regresado a Galicia otros policías que se hallaban temporalmente trasladados a otras zonas de España, según Luis García Mañá, jefe superior de Policía de Galicia, que agregó que han llegado también a esta comunidad dos nuevos helicópteros para patrullar los montes desde el aire.