La factura del combustible
El Reino Unido mejora su crecimiento pero no logra controlar el déficit
La economía británica ha cerrado el segundo trimestre con un crecimiento del 2,6% gracias a las manufacturas y la industria. No obstante, la elevada factura de los carburantes ha disparado el déficit fiscal. Los pronósticos oficiales indican que la quinta economía del mundo vulnerará por tercer año consecutivo el Pacto de Estabilidad, lo que podría presionar un alza de los impuestos.
La deuda pública se ha elevado hasta el 37,6% del PIB a finales del primer semestre, frente al 35,4% registrado un año antes
La economía británica creció un 2,6% interanual durante el segundo trimestre del año gracias a las manufacturas y a la industria
Los últimos datos de la Oficina de Estadísticas británica indican que el PIB del Reino Unido se elevó un 2,6% interanual durante el segundo trimestre del año. Esto significa que la quinta economía del mundo creció un 0,8% en junio si se compara con el mes de mayo, superando en una décima las previsiones de los analistas y la mejor cifra en los últimos dos años para esta fecha. La producción británica se ralentizó hasta un 1,9% durante el curso pasado, tras elevarse un 3,3% en 2004.
Las manufacturas y la producción de bienes, que han crecido a tasas del 0,8% durante este mes, y el consumo interno, que mantiene un ritmo del 2% anual, han sido los principales factores del crecimiento del PIB durante la primera mitad del año, a pesar de que no han recuperado el dinamismo de 2004. El comercio exterior, que se elevará a tasas anuales del 7%, representa, junto al gasto de las familias, la mitad del crecimiento actual del Reino Unido.
Desequilibrio fiscal
No obstante, el crecimiento británico sigue lastrado por su elevado déficit. En junio, el desequilibrio fiscal llegó a 9.500 millones de euros, comparado con los 7.000 millones registrados durante el mismo mes del año pasado. Durante el segundo trimestre, el desequilibrio llegó a los 18.900 millones, un 15% superior a los datos registrados en 2005. Los pronósticos señalan que si se cumple la tendencia, el desequilibrio fiscal podría llegar a cerca del 3,9% del PIB durante este periodo fiscal, vulnerando por tercer año consecutivo el Pacto de Estabilidad.
Estas últimas cifras han elevado la deuda pública hasta el 37,6% del PIB al final del primer semestre frente al 35,4% registrado hace un año y al 30% registrado en febrero de 2002. Con todo, este dato ha caído desde un 44% en 1997, el más alto desde la mitad de los años ochenta. El PIB del Reino Unido llega a los 1,7 billones de euros. Con todo, el gran problema de la economía británica es la elevada factura energética que deben pagar mensualmente debido a las sucesivas alzas en los precios de los combustibles.
La nueva tasa aplicada al combustible del mar del Norte y el alza del precio del petróleo afectarían al consumo interno, según las versiones oficiales, el principal factor que ha disparado el déficit fiscal. No obstante, los analistas señalan que el Gobierno puede realizar algunos ajustes para ordenar sus cuentas. El Reino Unido tiene aún margen para reducir gastos de la Administración central y podría hacer más eficiente la gestión del sistema de beneficios sociales.
Precios controlados
La recaudación estatal sigue siendo débil, por lo que algunos expertos locales ya han advertido que la única solución viable en el medio plazo sería el aumento en los de impuestos, un tema que no ha sido tratado por el Gobierno de Tony Blair. La buena noticia es que la inflación se encuentra bajo control, un respiro para la política monetaria. Los precios han crecido un 2,5% en junio, desde un 2,2% en mayo, manteniendo los mismos niveles desde el segundo semestre del año pasado.
El Banco de Inglaterra mantuvo la tasa de interés en el 4,5% en su reunión de principios de mes. El instituto emisor considera que ahora la inflación no supone ningún peligro. Por su parte, el desempleo registrado durante el último trimestre fue del 5,4%, levemente superior al periodo anterior y casi un punto por encima de los registros anuales.
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