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Canal + presenta el nuevo perfil 'folk' de Bruce Springsteen en concierto

Diego A. Manrique

Canal + presenta hoy (0.05) la última aventura musical de Bruce Springsteen. Grabado por la BBC en una iglesia, se trata de la plasmación en directo de su disco más reciente, We shall overcome: the Seeger Sessions. Es el mismo espectáculo improbable que en octubre recorrerá cinco ciudades españolas: el autor de Born to run, acompañado por instrumentos tan escasamente rockeros como el bombo, el violín rural, el acordeón o la tuba; aparte de la presencia de la señora Springsteen, Patti Scialfa, nada recuerda a las belicosas bandas urbanas de anteriores visitas.

Por sorpresa, Bruce ha dado un giro a su trayectoria con We shall overcome: the Seeger Sessions: el material allí recogido consiste esencialmente en canciones tradicionales popularizadas por el gran patriarca del folk, Pete Seeger. Un gesto con lectura política: Seeger es seguramente el "rojo" por antonomasia de su país, un personaje que sufrió las listas negras y ahora, a los 87 años, se ve reivindicado por la gran estrella del rock.

Pero también hay una apuesta estética detrás del homenaje. Se sabe que Pete Seeger es un hombre ascético, tanto en lo personal como en lo musical: aunque invita al público a que se una a su canto, su único soporte suele ser el banjo de cinco cuerdas. Springsteen ha decidido convertir su escenario en una fiesta: se presenta con The Seeger Sessions Band, una tropa de 17 instrumentistas y coristas que empujan cada concierto hacia una celebración comunal.

Digamos que Bruce se ha inventado algo que se podría denominar "folk & roll". Los metales sugieren una orquesta de dixieland de Nueva Orleans, el coro mixto se interna en el territorio sagrado del gospel afroamericano, hay instrumentos identificados con el country más ancestral, suena un piano de taberna. Gran audacia: el yanqui de Nueva Jersey ofreciendo su visión bohemia de las músicas del sur profundo. En el proceso, según las cámaras de la BBC, parece disfrutar como nunca.

Aunque los textos de este cancionero tiendan hacia lo sobrio y lo dolorido, Springsteen los introduce de forma jovial, alternando las bromas y los parlamentos explicativos. Los desarrollos de la Banda de las Sesiones de Seeger son extensos, con subidas y bajadas, con margen para solos. Eso explica que aunque Bruce Springsteen en concierto: the Seeger Sessions dure casi una hora allí sólo quepan ocho canciones. Canciones expansivas que invitan a dar palmadas, a acompañar los estribillos, a ser partícipes de la historia secreta de Estados Unidos tal como se conserva en la memoria de Pete Seeger y, ahora, en la de ese discípulo llamado Bruce Springsteen.

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