"Tengo ahorros, pero me falta estabilidad laboral"
Adolfo Ortega Mayoral, de 35 años, vive con su madre, de 64, en el barrio de La Elipa, en Madrid. Desde hace año y medio trabaja en Correos con contratos temporales de dos o tres meses, nunca más largos.
"Tengo mis ahorrillos, pero me falta estabilidad laboral", contesta cuando se le pregunta por teléfono si se ha planteado comprar una vivienda. Un problema bastante común: al alto precio de la vivienda se suma la falta de estabilidad laboral. La empresa se complica casi hasta lo imposible.
"Comprar un piso es una opción interesante porque tienes algo tuyo, pero no puedes conseguir una hipoteca si no acreditas un contrato estable. El mismo banco de Correos no presta a los contratados temporales más de 3.000 euros porque no damos garantías. No veo bien que no den facilidades", comenta Adolfo, que prepara unas oposiciones a las que se presentará el próximo 23 de julio.
Sabe que con su sueldo es difícil acceder a la propiedad. "Vivir con 800 euros al mes es complicado. ¿Quién te va a avalar con pisos de 240.000?". Pero también encuentra difícil el arrendamiento. "Si hubiera un mercado del alquiler...".
"Los precios de las tecnologías bajan; y, en cambio, las cosas básicas como la vivienda, no", añade. "Es un negocio contra un derecho".
Adolfo estuvo en la última manifestación que se celebró en la Puerta del Sol por la vivienda digna el pasado 2 de julio. "Hay que exigir más apoyo de los gobiernos. El artículo 47 de la Constitución queda muy bonito, es una intención loable".
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