El PSOE y el PP se enfrentan por su posición ante el conflicto

La escalada militar en Oriente Próximo ha salpicado también la lucha partidista entre el PP y el PSOE en España. Los populares acusaron ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de "antisionismo" por la "demagogia populista de convocar y apoyar una manifestación contra Israel"; por "la enorme irresponsabilidad de haberse fotografiado" con el pañuelo palestino, y por sus "recientes declaraciones, equiparando a Israel con los terroristas de Hezbolá y Hamás, que ponen en peligro el prestigio de España en la escena internacional".

Los diputados del PP Jorge Moragas y Gustavo de Arístegui reclamaron "solemnemente" al presidente Zapatero que desautorizara de forma pública las manifestaciones convocadas para ayer por la tarde por varios partidos y asociaciones, incluido el PSOE, y que diera orden a los cargos socialistas de no acudir a ellas.

No desautorizarlas, como no se hizo, significa, para el PP, "deslizarse por el tobogán de la radicalidad" y situar al Gobierno español "en tiempos en los que la Guerra Fría y los no-alineados presidían las relaciones internacionales". Según el PP, Zapatero muestra una "dolosa ignorancia de las causas del conflicto, que no están ni en Tel Aviv, ni en Jerusalén ni en Beirut. Están en Teherán, que utiliza a su brazo armado vicario que es Hezbolá". Los populares mantienen que ha sido Irán quien ha desatado el conflicto justo en el momento en el que la comunidad internacional le pedía cuentas por sus intenciones nucleares bélicas.

"¿Y los muertos?"

En primer lugar, el PSOE, a través de su portavoz parlamentario, Diego López Garrido, se preguntó por qué el PP se fijaba en "el atuendo" del presidente del Gobierno, en relación al pañuelo palestino, y no "en los muertos, niños, mujeres, todos civiles", que estaban cayendo por la ofensiva israelí.

No obstante, los socialistas rechazan con enojo las acusaciones de "antisemitismo" que se les vierten. La posición oficial la marcó ayer la responsable de Política Internacional, Trinidad Jiménez, tras reunir el Grupo de Trabajo del Mediterráneo que preside. El PSOE "condena las acciones militares de Hezbolá, tanto en el inicio de la crisis como en el lanzamiento de misiles contra la población civil de Israel. Esos ataques van en contra de la legalidad internacional y deben parar ya". En ese contexto, el PSOE pide el cumplimiento de la resolución 1559 de Naciones Unidas, que incluye el desarme de todas las milicias en el Líbano.

Pero con la misma intensidad se pide a Israel "cesar en sus ataques masivos e indiscriminados sobre el Líbano; su derecho a la legítima defensa, que reconocemos, no debe confundirse con ofensivas militares masivas que causan numerosas víctimas civiles y destruyen instalaciones civiles". En la dirección del PSOE se asegura que no atacan en absoluto al Gobierno y menos al Estado de Israel sino a esta acción concreta.