De Gilberto Gil al Koala pasando por Morente

La ciudad sigue recibiendo las más variadas propuestas musicales, con dos lugares, los Jardines de Sabatini y el Cuartel del Conde Duque, donde esto se hace más notable. Entre uno y otro, desfilan estos días brasileños de antiguo y nuevo cuño como Marcelo D2 y Gilberto Gil, flamencos como Enrique Morente, Tomatito y Enrique de Melchor, o folkies como The Chieftains y Eliza Carthy. Bela Fleck, Jerry González y Pedro Ruiz Ferrer son otras interesantes propuestas alejadas de esos dos puntos mientras que arrecian las fiestas patronales de los pueblos madrileños: en La Cañada actúa El Koala, el fenómeno del verano.

- Universo de ritmos. El mundo cabe en un patio y en un jardín, así, la programación de Veranos de la Villa 2006 tiene hoy en el Conde Duque a los irlandeses The Chieftains. La recuperación de la música tradicional que ha hecho famoso a este grupo que lidera el patriarca Paddy Moloney, inspira también a Eliza Carthy, que estará mañana en Sabatini. Al frente de The Ratcatchers, la joven violinista y cantante Eliza, sigue la estela de sus afamados padres -Norma Waterson y Martin Carthy- para modernizar el folclore británico.

Pero es el ritmo de Brasil el que prima, aunque se han caído dos esperadas actuaciones: en el Cuartel no estará Seu Jorge compartiendo velada con el rapero Marcelo D2, ni en los Jardines de Sabatini cantará la jazzera Luciana Souza con el guitarrista Romero Lubambo. Le queda, por tanto, a Marcelo D2 una prometedora noche para él solo, a base de ese estilo del que se le considera creador, el samba hip-hop.

En el Conde Duque cierra la semana el inevitable Gilberto Gil, uno de los padres del tropicalismo y actual ministro de Cultura del Gobierno de Lula da Silva.

Hasta que su actuación llegue, por ese patio habrá pasado, además, el imponente cantaor Enrique Morente para defender sus últimas grabaciones, El pequeño reloj y Morente sueña la Alhambra.

También el tocaor almeriense Tomatito, al que acompañará su guitarra el pianista dominicano Michel Camilo, para hacer ahora juntos Spain again, la continuación al Spain que ya hicieron hace unos años. Las sentidas canciones de la griega a Haris Alexiou y el pop de inspiración americana del valenciano Revólver, sonarán también en el cuartel.

Mientras, en Sabatini, además de Eliza Carthy, se contará también con el jazz latino del pianista cubano Omar Sosa, y con el más electrónico de Wagon Cookin', el grupo de los hermanos Luis y Javier Garayalde. Jorge Pardo pondrá sus saxos y flautas al lado de la guitarra de Enrique de Melchor y la semana se despedirá con cadencias de reggae, mento y ska del grupo Jazz Jamaica.

- Tierra escondida. El banjo, tan utilizado en Norteamérica para el bluegrass, la música country y, a veces, para el jazz, suena de forma diferente con el neoyorquino Béla Fleck. Con su grupo Los Flecktones, Béla le ha dado al instrumento otra dimensión. Tras casi dos décadas de carrera, acaba de publicar The Hidden Land (La tierra escondida), que presenta ahora en Madrid, donde se arrima al jazz clásico para modernizarlo, y hasta se inspira en Bach para crear una música realmente imaginativa.

Otro jazzero irredento es Jerry González, neoyorquino también, pero de origen puertorriqueño y asentado en Madrid. Recuperado del accidente doméstico en el que sufrió varias quemaduras, González agarra su trompeta, fiscornio y percusiones para pasar dos noches en Clamores dando a conocer sus composiciones más recientes donde el jazz latino se arrima a ciertas sonoridades flamencas.

- De la seriedad a la broma pasajera. Unas cuantas décadas lleva el cubano Pedro Luis Ferrer haciendo canciones valerosas y llenas de contenido. Considerado también, junto a Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, aunque con menos fama, uno de los padres de la nueva trova cubana, Ferrer ofrecerá esta noche un recital donde la emoción se presupone.

Y hoy también inicia una semana completa en el Café Central la brasileña Anna Torres, y en Calle 54 el mozambiqueño Paulo Wilson. El jueves, en un pequeño café de Hoyo de Manzanares, actuará la libanesa Nayla, para alzar su voz contra el horror que vive estos días su país.

El rigor de estos y otros artistas que se distribuyen noche a noche por los bares de Madrid y que crean su tejido cultural contra viento y marea, contrasta con el éxito repentino de un artista como El Koala, convertido en el fenómeno de este verano. Su rock gañán sólo busca diversión y es el protagonista de las fiestas de Villanueva de la Cañada, donde también estarán los punkis Pignoise y la nueva cantautora Nena Daconte.

La semana guarda también el virtuosismo de la guitarra metalera de Joe Satriani, inmerso en su Supercolosal Tour que recala ahora en Madrid.