El Consell evita comprometerse a la mejora urgente de la seguridad e insiste en el error del maquinista

¿El Gobierno valenciano va a introducir mejoras de urgencia en la seguridad, como poner más balizas de control de velocidad, en el tramo del metro donde el pasado lunes murieron 42 en un accidente? La pregunta iba dirigida al consejero portavoz de la Generalitat, Vicente Rambla. La contestación fue: "El Gobierno está siempre mejorando las infraestructuras ferroviarias". Rambla ojeó sus notas y añadió: "Se va continuar en la línea de las actuaciones que se han venido realizando en los últimos años, durante los cuales se han invertido 129 millones en la línea 1". Dio más cifras, pero evitó asumir más responsabilidades y referirse a mejoras urgentes en la seguridad de la línea, en funcionamiento de nuevo. Insistió en que el siniestro es consecuencia de "un error humano" del maquinista originado por "razones inexplicables", lo que hizo que el tren circulara a 80 kilómetros por hora, cuando el máximo es 40. Un error como los que se producen "todos los días en las carreteras" y no se piden dimisiones, agregó Rambla.

Tras anunciar anticipos de las indemnizaciones a las víctimas por valor de hasta 60.000 euros, el consejero amenazó con acciones legales. "No podemos permitir que haya personas que denuncien hoy con total impunidad la existencia de razones de falta de seguridad cuando hace una semana no se producían esas denuncias", explicó. ¿Y las reiteradas denuncias de inseguridad realizadas en los últimos años por los sindicatos o de un maquinista? "Forma parte de la reivindicación lógica y legítima de los sindicatos", respondió. Rambla aseguró que el Consell quiere que se sepa todo y que si se constituye una comisión de investigación habría que llamar, entre otros ex cargos socialistas, a José Barrionuevo, porque era ministro de Transporte cuando se inauguró la línea. También incidió en que el actual Consell "no ha inventado ni esa línea ni esa curva".

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, apoyó ayer sin fisuras la línea argumental del Consell y señaló que el Consistorio no pedirá más inversiones en la línea 1, porque las mejoras "por más de 400 millones de euros" ya están recogidas en el plan de la Generalitat.

Antoni Such, portavoz adjunto del grupo socialista en las Cortes Valencianas, dijo que las manifestaciones de Rambla "le daban pena". Afirmó que "los responsables públicos están para explicar por qué ocurrieron determinados hechos" y acusó al PP de "escurrir el bulto". "¿Van a llamar a Rafael Blasco a la comisión porque era el consejero de las obras de esa línea?", preguntó.