Frings, castigado sin semifinal

La FIFA suspendió al centrocampista defensivo alemán Torsten Frings para el partido de semifinales que se juega esta noche a las 21.00 en el Westfalenstadion en Dortmund. La sanción contra Frings se adoptó como consecuencia de los incidentes ocurridos tras el lanzamiento de los penaltis que eliminaron a Argentina el pasado viernes en los cuartos de final.

La FIFA adoptó la decisión tras examinar las imágenes de televisión que muestan cómo, en el tumulto, Frings da un puñetazo al delantero argentino Cruz. En la pelea colectiva, el defensa suplente argentino Cufré propinó una terrible patada al central alemán Mertesacker y el centrocampista del Atlético Maxi Rodríguez golpeó por la espalda al alemán Schweinsteiger. Los jugadores argentinos perdieron los nervios ante los gestos de burla del alemán Borowski tras meter su penalti. A esto se añadía que el árbitro eslovaco Lubos Michel crucificó a Argentina con continuas faltas y aplicó el principio de In dubio pro Deutschland, a favor de Alemania en caso de duda.

La baja de Frings supone un inconveniente importante para Alemania. El centrocampista del Werder Bremen había jugado hasta ahora a un gran nivel en el Mundial. Frings realizó un extraordinario partido contra Argentina, aburrió al cerebro del equipo argentino Riquelme, cuya sustitución tuvo una repercusión importante en el desenlace del partido.

El seleccionador alemán Jürgen Klinsmann se las prometía muy felices ayer al mediodía en Berlín. Ni él, ni el capitán Ballack pensaban que Frings sería sancionado. La culpa de todo, según ellos, había sido de "los provocadores" argentinos y una consecuencia del llamado "temperamento meridional". El ejecutivo de la selección alemana, el ex delantero Oliver Bierhoff, y el ex madridista Günter Netzer, comentarista de la primera cadena pública de la televisión ARD, atribuyeron a ese rasgo del carácter nacional los incidentes con un "Ya sabemos cómo reaccionan los meridionales".

En la rueda de prensa ayer en Berlín, antes de volar al lugar de concentración cerca de Dortmund, Ballack declaró que ni se les pasaba por la cabeza considerar que la FIFA pudiera sancionar a Frings. El seleccionador Klinsmann declaró: "Aceptaremos cualquier decisión de la FIFA, pero estamos convencidos de su inocencia. Fue la reacción a la horrible patada contra Mertesacker. El arbitró reaccionó y mostró la tarjeta roja". Klinsmann alabó a Frings y afirmó que, en el partido contra Argentina, anuló a Riquelme.

Klinsmann atribuyó la cuestión de Frings a que los medios intentan cualquier cosa para incrementar su tirada ante una semifinal del Mundial. En la hipótesis de una sanción aseguró: "No sería un problema. Todos están preparados y al acecho". Esto en alemán se dice con una frase más bélica que se traduce como "con el fusil dispuesto". El seleccionador alemán zanjó las preguntas de los periodistas con un tajante: "El sustituto está preparado. Estamos preparados para todas las situaciones".

Klinsmann ha conseguido jugar casi todos los partidos con el mismo equipo y la baja de Frings representa un gran problema. Frings se había convertido en el escudero por delante de los centrales alemanes que empezaron el Mundial con síntomas de debilidad. La buena actuación de Frings y la bajada de Ballack a la zona de medios propia contribuyeron a fortalecer la defensa alemana. Para sustituir a Frings la alternativa es Kehl o Borowski. Kehl es más defensivo y ocupa ese mismo puesto en el Dortmund, escenario del partido de hoy. En el Westfalenstadion la selección alemana jamás perdió, ganó 13 partidos y empató uno. Podría inclinarse Klinsmann por Borowski. Esta sería una opción más ofensiva.

Las primeras reacciones en Alemania ante la sanción a Frings eran de estupor. Algunos comentaristas trataban de hacer de la necesidad virtud y aseguraban: "Esto motivará más a la selección para derrotar a Italia".