Miriam Ocariz presenta la esencia de su trabajo creativo en una exposición

La apertura de esta muestra coincide con el final (el 9 de julio) de Dibujando al revés, una muestra colectiva en el palacio Montehermoso de Vitoria, en la que participa Ocariz.

Es la primera vez que Miriam Ocariz (Bilbao, 1968) expone en su ciudad natal, fuera de los habituales desfiles o muestras de moda, esta obra artística que es "el germen" de su obra creadora, de lo que luego se estampará en tejidos y marcará el diseño de su ropa. Licenciada en Bellas Artes, sus originales dibujos fueron la primera seña de identidad de esta diseñadora de moda. Lo siguen siendo. Y Ocariz quiere mostrarlos ahora con toda su fuerza, ya que en las prendas de ropa que realiza muchas veces los dibujos se "pierden" en el mismo patronaje de la ropa, convertidos en "un motivo muy pequeño y, sin embargo, muy elaborado", explica la diseñadora.

La galería Espacio Marzana de Bilbao (Muelle de Marzana, 5) culmina su temporada expositiva con esta propuesta diferente, "mostrando al público la obra más personal y desconocida de Miriam Ocariz", como indican los propietarios de la galería, Roberto Atance y Jesús Uranga. Se descubre aquí, y hasta el próximo 15 de septiembre, el proceso de trabajo de la diseñadora y lo que abarca su mundo creativo. Los dibujos y bocetos son, en la mayoría de los casos, el origen de las ideas de la artista, que luego son descritas en los tejidos y en las formas de la vestimenta.

"Espacio ilusorio"

La diseñadora ha ocupado toda la galería, desde las paredes a los suelos, creando "un espacio ilusorio", explica Ocariz. "He desarrollado un tema que tenía en la cabeza hace tiempo partiendo de la esencia de mi trabajo, que es el dibujo. He cubierto las paredes con mis dibujos en papel, como una suerte de papel pintado. Mi propósito ha sido llevar el dibujo a otros soportes", apunta.

Por ello, también ha tapizado un sofa, construyendo así el salón de una casa. Para dar aún más la impresión de un hogar, ha colocado diversos detalles, como un gran cuadro que cuelga de la pared y que muestra un minibar que la diseñadora tiene en su domicilio y donde, además, figura ella retratada con una copa en la mano. Acostumbrada a las pasarelas, Ocariz dice que no le ha resultado extraño exponer en una galería "Lo que yo hago no pertenece solamente al mundo de la moda, sino que es una mezcla de muchas cosas", indica. Y revela que en su mente se está fraguando la idea de, quizá en el futuro, ampliar su línea a tejidos de decoración o a otros soportes decorativos, como el papel pintado.

La moda, sin embargo, no está ausente en la exposición de Miriam Ocariz. En Espacio Marzana se presentan también sus primeros bocetos, composiciones elaboradas que fueron luego aplicadas en tejidos, y algunas prendas acabadas. "Pero no es un desfile, ni tampoco me parecía adecuado mostrar la ropa sobre maniquíes estáticos", comenta sobre su concepción de la muestra. Figurines, dibujos y tejidos sirven de referente para guiar al visitante por el proceso de trabajo de Ocariz, por su peculiar universo.