Scolari: "Podemos ganar el título"
El técnico de Portugal elogia a Ricardo mientras Eriksson cree que "la roja a Rooney lo cambió todo"
Luiz Felipe Scolari, el seleccionador de Portugal, no quiso engañar a nadie y lo repitió muchas veces: "Ricardo es un héroe". El portero detuvo tres penaltis. "Nada menos, creo que es muy meritorio", insistió. Nunca un portero había detenido tantos lanzamientos en una tanda en un Mundial. El meta lo explicó con un argumento teológico: "Dios estuvo con Portugal".
El técnico brasileño reconoció que el combinado inglés había jugado "bien, incluso con un hombre menos", y cifró la diferencia en el destino de los dos equipos en "la suerte". Negó que hubiese preparado los penaltis y rehusó buscar explicaciones a los fallos ingleses: "Es todo una lotería, no hay más".
Sven-Goran Eriksson, con aspecto de estar muy abatido, sí reveló que su equipo había ensayado los penaltis. "No se pueden practicar más", comentó. En opinión del técnico sueco, la clave fue que Inglaterra se desgastó mucho por su "generosidad" y llegó a "la parte final muy mal físicamente". Eriksson reivindicó la actuación de sus futbolistas y dijo que su equipo "debería seguir en el torneo". Citó en varias ocasiones al árbitro, el argentino Horacio Elizondo. Ninguna para elogiarlo. Habló de la expulsión de Rooney, "que lo cambió todo", y de la cantidad de ocasiones falladas. "Jugamos mejor, bien", concluyó antes de confesar que dedicará los próximos días "a entender qué ha pasado". Por de pronto, también señaló a Ricardo como "un héroe". Curiosamente, el elegido como mejor del partido fue Heargreaves, algo que no comparte Scolari: "Yo, personalmente, no tendría ninguna duda. Ricardo ha parado tres penaltis y con eso es suficiente".
Scolari, bastante moderado en la gestualidad, aseguró que Portugal "ha hecho historia" y negó que hayan tocado techo en sus posibilidades. "Podemos ganar el Mundial, claro que sí", afirmó, aunque agregando: "Pero es difícil". El mítico Eusebio reforzó las palabras de Scolari: "El camino está abierto. Vamos hacia el título. Ya era hora de que igualasen nuestro resultado de 1966". En opinión del preparador brasileño, la clave para conseguirlo está en "la concentración" y se felicitó de que es "más fácil trabajar cuando llegan las victorias". En el lado negativo recordó las lesiones de Figo y Cristiano Ronaldo, de quienes deseó que se "recuperen antes de las semifinales". Ricardo, el hombre más felicitado, dijo que "aún quedan kilómetros para Berlín".
El capitán, Simão, insistió en la letanía favorita de los portugueses anoche, su "derecho a soñar", y dijo que "todo es posible". También hizo un poco de autocrítica cuando concedió que su selección "no supo jugar contra un equipo con 10 futbolistas". El lateral valencianista Miguel, además de apuntarse al optimismo general, también reconoció haberlo "pasado muy mal" e ironizó: "Podíamos haber estado un día entero jugando que nadie habría marcado un gol".
Eriksson concluyó su apesadumbrada comparecencia señalando "el hecho objetivo" de que su equipo estaba "fuera" a pesar de haber tirado mucho más "entre los tres palos" y que esa circunstancia le parecía "injusta".
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