Batasuna considera de gran calado político el compromiso de respeto a la decisión de los vascos

La ilegalizada Batasuna recibió con un evidente entusiasmo la declaración del presidente José Luis Rodríguez Zapatero que abre el diálogo con ETA. Su portavoz, Pernando Barrena, calificó la declaración de "positiva", y de "gran calado político" su contenido de compromiso de "respeto a las decisiones que libremente adopten los vascos". El Gobierno vasco celebró que se abra "la puerta al diálogo político", y dijo que, "al revés de lo ocurrido hasta ahora", la decisión de la sociedad vasca "deberá ser respetada". Patronal, sindicatos y partidos, salvo el PP, mostraron esperanza ante el anuncio.

Algo más de dos horas tardó Batasuna en expresar su reacción al mensaje de Rodríguez Zapatero. Con un entusiasmo contenido pero evidente, el portavoz Pernando Barrena y la dirigente Marije Fullaondo, comparecieron en rueda de prensa, que fue muy breve, para hacer una valoración de "urgencia" que será hoy complementada con un documento político en el que se contenga el análisis "más sosegado y pormenorizado" de la formación.

No obstante, Barrena adelantó la línea en la que abundará el documento que hoy presentarán a la prensa en San Sebastián. Batasuna considera "positiva" la intervención de Rodríguez Zapatero. Y añadió que se trata de una declaración de "gran calado político" por dos razones: la primera, porque abre "el ámbito de diálogo entre ETA y el Gobierno español" y la segunda es su contenido de compromiso por parte del Gobierno de "respetar las decisiones que los ciudadanos vascos adopten libremente".

El portavoz abertzale precisó que esta última declaración es de "gran importancia" porque se trata de un compromiso del Gobierno español que constituye "un concepto fundamental" para el proceso "político y democrático que ya está en marcha en este país".

En sus casi diarias comparecencias públicas, Batasuna ha estado reclamando sin cesar una declaración del Gobierno que contuviera su voluntad de respetar la decisión de los vascos, en un intento de establecer un paralelismo con el proceso irlandés. Ayer, Barrena dio a entender que su reclamación de compromiso -que entienden como un reconocimiento explícito del derecho de autodeterminación -estaba contenido en las palabras de Rodríguez Zapatero: "Desde los principios democráticos les digo que el Gobierno respetará las decisiones de los ciudadanos vascos que adopten libremente".

Barrena, sin embargo, no incluyó en su positiva valoración que la frase citada está incompleta y que continúa precisando que toda decisión que los vascos adopten libremente deberá adoptarse "respetando las normas y procedimientos legales, los métodos democráticos, los derechos y libertades de los ciudadanos y en ausencia de todo tipo de violencia y coacción".

El portavoz de Batasuna no concretó más detalles sobre la declaración presidencial, ni sobre los aspectos que en ella se contienen como el anuncio de mantener la vigencia de la Ley de Partidos o el cómo debe abordarse el diálogo para adoptar un "pacto de convivencia".

El Gobierno vasco se expresó a través de una escueta declaración que leyó su portavoz, Miren Azkarate. El Ejecutivo autónomo realizó una valoración "positiva" del anuncio de que "por fin" se iniciará el diálogo con ETA, al tiempo que reitera al presidente del Gobierno que puede contar "con el compromiso del lehendakari de las instituciones de este país para alcanzar una paz duradera, universal e irreversible".

Azkarate dio cuenta de la coincidencia del Gobierno vasco en atribuir el proceso de búsqueda de soluciones políticas en exclusiva a las fuerzas políticas vascas y celebró que la comunicación de Zapatero abra además "la puerta de la política y del debate político para encontrar soluciones de futuro".

El Ejecutivo vasco aprovechó la ocasión para recalcar que la solución a la que lleguen las fuerzas vascas "deberá ser respetada", "al revés de lo ocurrido hasta ahora", afirma, con el "incumplimiento del Estatuto de Gernika" y el "portazo en las Cortes" al plan Ibarretxe. La portavoz anunció para la semana próxima una reunión del denominado Consejo Político, un órgano que Ibarretxe tiene constituido en su gabinete con los cabezas visibles de las otras dos fuerzas del tripartito, EA y Ezker Batua, Joseba Azkarraga y Javier Madrazo.

Patronal y sindicatos

Tanto la patronal vasca, Confebask, como el Círculo de Empresarios, expresaron su respaldo, igual que los sindicatos a los que el presidente se refirió en su declaración. Confebask calificó la decisión de "esperada y positiva" y ofreció su apoyo ante un cometido que tacha de "difícil" y que debe garantizar la ausencia de violencia para todos los colectivos para ser real. El Círculo de Empresarios dio su "sincero y leal respaldo" al intento de alcanzar la paz, pero precisó que debe darse desde el consenso democrático, el respeto al ordenamiento jurídico, a la pluralidad y a la memoria de las víctimas.

Los partidos vascos, a excepción del PP, que entendió que Zapatero ha aceptado el derecho de autodeterminación, se mostraron esperanzados, y similar actitud tuvieron los sindicatos CC OO, UGT y la mayoritaria central nacionalista ELA, que calificó el anuncio de "buena noticia", pero pidió nuevos pasos al Gobierno.