Henry, la amenaza
El delantero del Arsenal está en boca de la mayoría de jugadores españoles como el rival más admirado y temido para el partido de hoy
A veces parece que la selección española no juega hoy contra Francia sino contra Henry, en la que puede ser la despedida de Zidane. El protagonismo de Titi es tan grande que preguntan por sus andanzas futbolísticas en todos los idiomas. Ayer, por ejemplo, un periodista inglés provocó el enojo y después la sorna de Luis cuando adivinó que le preguntaba por el "negro de mierda", como calificó el seleccionador al jugador francés en un cara a cara intimidatorio con Reyes durante un entrenamiento para estimular al futbolista andaluz. "De aquello hace ya año y medio", saltó el técnico recordando el 18 de octubre de 2004. "Y ya sabe lo que pasó porque tiene un compañero que se lo ha contado", respondió Luis al "cachondo gafitas" que le preguntó. "Henry ya conoce a través de Reyes, de Eto'o, de otra gente, lo que quería decir".
Reyes: "Es el mejor. Tiene velocidad, regate, recursos para rematar y es muy trabajador"
Cesc: "Siempre se ofrece y su control de balón es extraordinario. Lanzado, es muy difícil pararle"
Puyol: "No hay que obsesionarse con una marca personal. Hay que defenderle en equipo"
Y aunque anunció que no dedicaría al tema "ni un segundo más", intentó reiterar de manera rocambolesca que para nada es una persona racista ni quiso ofender a Henry. "Tengo amigos gitanos y también japoneses. Uno de mis amigos es un sexador de pollos japonés", un anuncio que le permitió explicar en qué consiste tal oficio ante la carcajada general y la sorpresa del periodista inglés, incapaz de interpretar, con y sin ayuda, las ocurrencias del técnico.
A Puyol, el capitán del Barcelona, también se le preguntó por Henry. El azulgrana confiesa que Titi es el delantero que más problemas le ha causado. Aunque el Arsenal perdió con el Barça en la final de la Copa de Europa, Henry fue el mejor del partido. Únicamente Valdés, que había visualizado en los entrenamientos los diferentes remates que practicaba el punta francés, logró ganarle en el mano a mano. "No hay que obsesionarse con una marca personal", contestó Puyol. "Hay que hacer una defensa de equipo. Habrá que juntar bien las líneas, procurar que no reciba balones fáciles y enfrentarle con mucha concentración. Hay que negarle los espacios porque los genera y domina como nadie". Puyol confía en su despliegue físico y en la velocidad para frenar a Henry. Los dos son rápidos y la ayuda de Pablo y Sergio Ramos, sobre todo si el francés se deja caer por la izquierda, resultará tan importante como la sincronización de la defensa a la hora de achicar y tirar el fuera de juego.
"No se si será suficiente", advierte Reyes. "Depende de si tiene el día, en cuyo caso es imparable. Para mí es el mejor delantero del mundo. Tiene velocidad, llegada, regate y cuenta con muchos recursos a la hora de rematar. Tiene de todo y es muy trabajador. La clave será quién marque el primer gol; si son ellos, malo porque Henry, con campo por delante, es un purasangre muy difícil de tirar". "Es un delantero de los más completos del mundo física y técnicamente" precisa Cesc, su compañero en el Arsenal y hoy rival. "Es un fenómeno. Arranca, conduce, protege y le pega de maravilla. Resulta desequilibrante porque ataca con determinación. A los centrocampistas siempre se nos ofrece y su control de balón es extraordinario tanto parado como en carrera. Una vez lanzado, es muy difícil pararle".
El problema para Henry es que Francia no es precisamente el Arsenal. Aunque ha participado de los títulos de campeón del mundo y de Europa con la selección, Titi no tiene la misma importancia ni impacto. Incluso se discute si debe jugar solo o acompañado de Trezeguet porque a veces se solapan cuando en los tiempos del Mónaco se necesitaban. "Si hay 20 tíos en el área", llegó a comentar Henry en la pasada Eurocopa, "el balón siempre le cae a Trezeguet". Fue en el torneo de Portugal 2004 cuando Titi comenzó a jugar por la banda izquierda siendo un diestro y se apreció su habilidad para tirar desmarques y abrir el ángulo de disparo con su pierna derecha.
Los fisiólogos coinciden en que podría haber sido un atleta, incluso de vallas, por su cuerpo estilizado y elástico y su explosividad, virtudes que aplicadas al fútbol le permiten una especial habilidad para desmarcarse, desbordar y rematar. Quizá porque domina todas las funciones que se le piden a una delantera completa no necesita acompañante en el ataque.
"No sé si podré hacer todo el Mundial solo delante", comentó antes de jugar contra Togo. "Debo desmarcarme mucho para crear huecos y ocasiones. Ha habido momentos en los que me he ido y tenía un sentimiento de soledad". Los centrocampistas de los gunners nada tienen que ver con los bleus. Henry, a sus 28 años, acusa la diferencia aunque, en la selección, es Zidane quien puede asistirle.
"Es capaz de hacer algo extraordinario en cada jugada, una carrera, una explosión de velocidad, un remate y normalmente un gol", ha dicho el escritor Nick Hornby, distinguido hincha del Arsenal, club del que Henry es el máximo goleador de la historia con más de 20 cada uno de los cinco últimos años. Tan a gusto está en Londres que acaba de renovar su contrato por cuatro temporadas. Otra cosa distinta es la selección.
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