"La gente que reprime sus emociones tiene muchos trastornos"
Pablo Fernández Berrocal (Málaga, 1964) es profesor titular de Psicología de la Universidad de Málaga. El pasado viernes participó en San Sebastián en los Cursos de Verano de la UPV con la conferencia Desarrolla tu inteligencia emocional. Poco antes de su charla, aseguró que ésta es una habilidad en la que "las mujeres siempre puntúan por encima de los hombres".
Pregunta. ¿Qué es la inteligencia emocional?
Respuesta. Es la capacidad de las personas para percibir, comprender y regular sus emociones (tristeza, alegría, ira, miedo...) y las de los demás. Lo ideal es tener habilidad emocional personal y social, pero no siempre es así. Puede haber personas con una vida interior muy grande que, sin embargo, son poco sociables. Y al revés.
"La política está llena de una retórica emocional que puede caer en la manipulación"
P. ¿Se nace con habilidades emocionales o también se pueden aprender?
R. Existen factores genéticos. No hay más que dejar a un niño en una guardería. Hay pequeños que enseguida buscan el contacto con otros niños. Otros se quedan en un rincón hasta que alguien va a estar con ellos. Sobre esa base, lo bueno y lo malo de las emociones es que son muy modificables.
P. ¿La inteligencia emocional está incluida en los planes de estudio españoles?
R. No.
P. ¿Debería?
R. Sí. De hecho, en el País Vasco se está planteando incluirla. Por eso se ha llamado a diferentes especialistas, para ver cuál sería la forma más apropiada de hacerlo. Y eso en España es totalmente innovador.
P. ¿No existe experiencia alguna?
R. Hay profesores en diferentes sitios que han llevado a cabo alguna experiencia. Por ejemplo, enseñar las emociones a través de la Literatura. Se puede coger una obra como El maleficio de las mariposas, de Federico García Lorca, que habla sobre el amor entre diferentes animales, y usarla con los alumnos de seis o siete años para debatir sobre el amor. Se trata de que expresen qué sienten y empiecen a identificar con palabras sus sensaciones fisiológicas.
P. ¿Un adulto también puede educar sus emociones?
R. Si. Ahora se está dando mucha importancia a la inteligencia emocional en la empresa, porque se ve como un valor añadido.
P. ¿En qué más terrenos se puede aplicar?
R. En la salud. Hay estudios que establecen que las personas con más inteligencia emocional tienen menos posibilidades de desarrollar depresión o problemas de ansiedad. También se puede aplicar en las relaciones de pareja.
P. ¿Y en la amistad?
R. A mayor inteligencia emocional, más amigos y de más calidad, de manera que cuando surge un problema, esa persona sabe que puede contar con sus amigos y viceversa. Las investigaciones demuestran que el apoyo social es una de las variables más importantes en el equilibrio personal de la salud.
P. ¿La inteligencia emocional interpersonal puede ser un arma para manipular al otro?
R. Si. El mundo de la política está lleno de una retórica emocional que puede caer en eso. Los psicólogos tenemos el sesgo de plantear todo esto en positivo: la inteligencia emocional para estar más sano, más satisfecho, para ser más feliz, pero se puede utilizar para engañar.
P. ¿Y puede llegar a coartar las emociones?
R. Propone hacer un uso más consciente y controlado de las emociones. Pero, claro, en nuestra cultura se tiende a confundir regular las emociones con reprimirlas. No es eso. La gente que reprime sus emociones tiene muchos trastornos psicosomáticos.
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