La Fiscalía de Cádiz alerta de que la levedad de las penas compensa a los narcotraficantes

La memoria de 2005 de la Fiscalía antidroga de Cádiz destaca como "muy positiva" la culminación con sentencias condenatorias de los asuntos de mayor trascendencia sobre entrada de hachís y cocaína a la provincia gaditana. Sin embargo, la titular de esta Fiscalía, Ana Villagómez, advierte de que en "muchas ocasiones" las penas impuestas a los traficantes les compensan porque no se han investigado los bienes que han podido comprar gracias al dinero conseguido con la droga. En 2005 se incoaron 2.287 procedimientos sobre narcotráfico en Cádiz.

Villagómez, fiscal antidroga de Cádiz, plantea en la memoria sobre las actividades de su departamento en 2005 que se debe "indagar para poder incautarse de las ganancias que han obtenido, que es lo que realmente los traficantes quieren conseguir con la comisión del delito".

Según consta en el informe anual, durante el año 2005 se incoaron 2.287 procedimientos relacionados con el narcotráfico. De ellos, 34 se abrieron por blanqueo de capitales. Entre ellos, la Sala Segunda del Tribunal Supremo desestimó este año un recurso de casación presentado contra una sentencia del Juzgado de Instrucción Número 1 de Ceuta, en el que un hombre era condenado como autor responsable de un delito de receptación de capitales procedentes de actividades de narcotráfico.

Además de condenarle a cuatro años, siete meses y 15 días de prisión y una multa de 162.000 euros, se decretaba el decomiso de todos y cada uno de los bienes que aparecían a su nombre: dos embarcaciones, dos motores fuera borda, un turismo y dos vehículos todo terreno. Bienes que, según la sentencia, el condenado había conseguido con el dinero de la droga y que, incluso, había utilizado para su transporte.

Esta sentencia es, para la fiscal Ana Villagómez, el ejemplo de lo que debería hacerse. Sin embargo, lamenta que no siempre suceda así. "En muchas ocasiones, las penas impuestas a los traficantes les compensan y, aunque se les pueda condenar, les resulta rentable realizar este tipo de delitos porque las ganancias no logran ocuparse".

De ahí, que pida que se profundice en la investigación del blanqueo de capitales. "Además de aplicarse con todo rigor las penas del Código Penal, con todos sus agravantes que permiten imponer condenas mayores, también hay que realizar investigaciones para poder conseguir incautarse de las ganancias que han conseguido a través del negocio de la droga", plantea.

Villagómez recuerda que aunque en casos de narcotráfico el bien jurídico que se protege es la salud de las personas, quienes "cometen esos delitos no lo hacen para atacar la salud de los demás sino para ganar dinero".

Nuevo grupo policial

El blanqueo de capitales será uno de los principales objetivos del nuevo grupo policial Greco, de respuesta al crimen organizado, que ha comenzado a trabajar en la provincia gaditana. Un cuerpo de élite, formado por 30 agentes y con sede en Chiclana de la Frontera, que satisface una reclamación de los colectivos antidroga y de la propia Fiscalía. "Cádiz lo necesita por sus características especiales. Hay delitos que no salen a la luz porque no hay medios para investigarlos. Se ve en la costa y también en Jerez, con los casos que han aparecido ahora sobre fraudes fiscales y a la Seguridad Social. Operan muchos grupos y el dinero tiene que estar en algún sitio", señala Villagómez.

La fiscal destaca, con todo, que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado como Policía Nacional, Guardia Civil y Vigilancia Aduanera han aumentado "sus conocimientos técnicos en esta materia, lo que redunda en una gran calidad de las investigaciones llevadas a cabo". También aplaude la labor de "la mayoría" de los jueces de instrucción, que adaptan sus resoluciones a la jurisprudencia del Supremo y permiten que numerosos asuntos terminen con condenas. La memoria hace una especial mención al importante logro que ha supuesto para el Ministerio Público en Cádiz disponer de dos fiscales antidroga con dedicación exclusiva desde finales del año pasado. "Supone un enorme beneficio", señala Ana Villagómez. Esto ha permitido que la Fiscalía antidroga pueda ahora contactar con los cuerpos de seguridad y los jueces, recabar datos para estadísticas fiables, estudiar jurisprudencia y mejorar la coordinación entre los 60 fiscales para que sigan los mismos criterios y doctrina.