Carod pide un 'no' que sea la expresión del catalanismo transversal

Esquerra Republicana (ERC) cerró anoche la campaña electoral en el palacio ferial de Girona en un ambiente de fervor independentista. El presidente del partido, Josep Lluís Carod, hizo una encendida apelación a los electores de CiU, del PSC y de Iniciativa Verds (ICV) para que rechacen "un Estatuto recortado" y hagan que el no sea la expresión del "catalanismo transversal".

La provincia de Girona fue ensalzada por uno de los oradores, Pere Vigo, diputado autonómico, como "el buque insignia del independentismo catalán" y la aspirante de ERC a la alcaldía de la ciudad, Cristina Alzina, explicó que su objetivo es lograr que Girona sea "una capital catalana de verdad". Por exigencias del horario de las conexiones en directo para los informativos de las televisiones, el orador que cerró el mitin fue el secretario general del partido, Joan Puigcercós, que habló después de Carod. Puigcercós calentó el ambiente, finalizó su discurso con un "Visca Catalunya lliure i independent!", y provocó que los asistentes respondieran con gritos sincopados de "in-de-pen-dèn-ci-a, in-de-pen-dèn-ci-a".

Los líderes de ERC animaron a sus seguidores a votar mañana haciendo caso omiso de que también el PP propugne el voto negativo. Puigcercós argumentó una vez más que en realidad el PP ha conseguido ya lo que quería en este Estatuto, que es eliminar la definición de Cataluña como nación del artículo primero e impedir que la Generalitat sea la encargada de recaudar todos los impuestos en Cataluña. Por lo tanto, lo que los electores del PP deberían hacer si fueran consecuentes, sería votar sí.

Carod explicó que los catalanistas de hoy deben hacer lo mismo que en las Cortes de la II República hizo el único diputado nacionalista catalán que se opuso en 1932 al recorte del Estatuto de Núria, Manuel Carrasco i Formiguera. Y deben hacerlo sean del partido que sea, dijo. Carrasco i Formiguera era uno de los fundadores de Unió Democràtica, el segundo partido que ahora forma parte de la federación de CiU. Haber coincidido en aquella votación con la derecha centralista que rechazaba el Estatuto no le salvó de ser fusilado por los franquistas en 1938, en plena Guerra Civil.

El catalanismo transversal al que Carod apeló entre los aplausos de los asistentes al mitin, es según él el que se manifestó en Barcelona el 18 de febrero, llenando la Gran Via desde la plaza de España a la de Cataluña. Llevados por la euforia, los organizadores de la manifestación proclamaron aquel día que habían reunido a un millón de personas. Los cálculos más fríos lo dejaron en 200.000. Pero Carod hizo un llamamiento a todos aquellos manifestantes, entre los que figuraban afiliados y simpatizantes de todos los partidos catalanistas, a llevar su no a las urnas.

Lo hizo, además, para negar indirectamente que haya una parte de los electores de la propia ERC que opte por el sí. "El único partido que defiende el no como un bloque es Esquerra", aseguró, "pero hay un no transversal, en el que se incluyen electores de CiU, del PSC y de ICV". A ellos reclamó un gesto de "dignidad nacional" para "no votar como Alfonso Guerra".