Las obras ejecutadas por el Ayuntamiento de Valencia sobrepasan en un 53,41% su coste incial, según Rubio

Las grandes obras ejecutadas desde 1999 por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, arrojan un sobrecoste del 53,41%, según denuncia el grupo municipal socialista tras analizar el presupuesto de adjudicación y el coste final de 15 proyectos. El portavoz, Rafael Rubio, achaca el incremento de la factura de esas obras en 53,5 millones de euros a la gestión de Barberá, ya que a su juicio desde que gobierna "el Ayuntamiento ha gastado a manos llenas, sin ningún tipo de control".

Los sobrecostes de los últimos años revisados por los socialistas alcanzan el 56,65% en el caso del polideportivo de Marxalenes, que tuvo un coste final de 3,5 millones de euros, mientras que la ampliación del Palau de la Música partió de una previsión de 13,7 millones de euros que acabaron en facturas por 25,5 millones (un 85,92% más).

Llamativo es también el caso de las obras en el antiguo Matadero, que supusieron una inversión de 26,2 millones, más del doble del presupuesto de adjudicación. Los socialistas también critican los sobrecostes de varias instalaciones deportivas, el Musical de El Cabanyal (un 38,57%); el puente de las Flores (23,22%) y del mercado de Colón, con obras de rehabilitación en tres fases que exigieron el desembolso de 38,5 millones de euros, un 41,8% más. También la reciente obra de la avenida del Puerto ha sufrido un incremento que representa un 13,47% más de lo presupuestado.

"¿Cuántos barrios como el de El Cabanyal se hubieran podido mejorar con todo el dinero dilapidado en sobrecostes como los del mercado de Colón?", pregunta Rubio, que achaca a la alcaldesa una "pésima gestión" que considera "preocupante" para las arcas municipales. Los socialistas también exigen a Barberá que reclame a la Generalitat los "casi 40 millones de euros que debe" al Ayuntamiento por varios convenios y los impuestos de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Rubio exige a la alcaldesa que aclare "quién o quiénes se han estado beneficiando desde hace una década de estos exagerados sobrecostes".

El edil insistió en la remodelación de la avenida del Puerto, que calificó como "el último despropósito de Barberá" y que, dijo, "ha impulsado contra la opinión de los vecinos y expertos". En ese sentido, recordó que "mientras en la avenida del Puerto alguien ingresa los sobrecostes, muchos comerciantes se han visto obligados a cerrar sus puertas debido a los retrasos".