Los trabajadores del hospital de La Vila protestan por la privatización del aparcamiento de vehículos
Una persona que vaya a hacerse una revisión al cardiólogo al Hospital de La Vila Joiosa (Marina Baixa) pagará entre 6 y 8 euros. Si se queda ingresado, entre 400 o 500 euros. Los familiares que vayan a verle también tendrán que abonar un mínimo de 1,5 euros por hora, tras el anuncio de privatización inminente del aparcamiento del hospital comarcal de La Marina Baixa en La Vila Joiosa, anunciada por el consejero de Sanidad. La junta de personal del centro está llevando a cabo todos los días concentraciones de protesta, ya que los trabajadores serán los más afectados, al tenerse que desplazar a diario hasta el hospital, situado a cuatro kilómetros de distancia del núcleo urbano de La Vila.
El secretario del PSPV en La Marina Baixa, Jaime Llinares, anunció ayer que su partido se va a sumar a las movilizaciones y va a intensificar los próximos días la campaña de recogida de firmas -ya han reunido 1.000- contra esta medida. La ejecutiva comarcal de este partido ha presentado mociones durante las últimas semanas a los plenos de todos los ayuntamientos, aunque en la mayoría de los casos han sido rechazadas al gobernar el PP. "Una muestra más de la división del PP es que en algunos municipios como Sella, donde gobierna han votado en contra de la privatización", indicó Llinares.
En esta moción los socialistas criticaban la "nula previsión de Sanidad, el crecimiento demográfico y la masificación del Hospital de La Vila", que han supuesto "un auténtico caos en la utilización del aparcamiento por parte de pacientes, acompañantes y de los propios profesionales sanitarios". Al estrés que conlleva tener que acudir a un centro sanitario por un problema de salud propio o de un allegado, el PSPV destaca que se suma otro, "tan prosaico como no tener dónde dejar el coche". El malestar se acentuó tras la visita realizada recientemente por el hasta hace poco consejero de Sanidad, Vicente Rambla, que invitaba a los usuarios del hospital a contratar los servicios de taxis para desplazarse. De hecho, una de las principales críticas, tanto de la Junta de Personal como de la oposición política, es el deficiente transporte sanitario que une el hospital, entre Benidorm y La Vila, con ambas ciudades.
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