La defensa del parricida de Elche alega que una lesión cerebral le exime de culpa

El abogado de José María M., acusado de matar a martillazos hace un año a su mujer y a sus dos hijos de 6 y 2 años, en su vivienda de Elche, pedirá al juzgado la eximente completa de condena por enajenación mental transitoria. El letrado alegará una lesión cerebral, detectada en una resonancia magnética que se le ha realizado al parricida en el Hospital Penitenciario de Herrera de La Mancha, (Ciudad Real). La defensa aportará, además, el informe del psiquiátrica José Antonio García Andrade que diagnosticó un trastorno límite de la personalidad. El detenido, sin embargo, se negó a ser diagnosticado por el forense propuesto por el juzgado.

El magistrado que instruye el caso solicitó al Hospital Penitenciario donde se encuentra el parricida la práctica de dos pruebas requeridas por el perito García Andrade como necesarias para completar su informe psiquiátrico y neurológico. Estas dos pruebas han sido un electroencefalograma, cuya conclusión es que está "dentro de los límites normales para la edad del paciente"; y una resonancia magnética que revela una "lesión inespecífica subcortical frontal izquierda". Según el perito de la defensa, esta lesión explica la gran violencia con la que actuó el parricida hacia su familia. El experto ya había diagnosticado un trastorno límite de personalidad al que se le sumó la importante embriaguez del día de los hechos así como la ingesta de drogas.

García Andrade añade ahora a su informe la lesión en el lóbulo frontal "con la que los tres síndromes atribuidos al informado adquieren un carácter más severo" y de esta forma dice que los trastornos de su personalidad así como la respuesta al alcohol y las drogas "tiene una mayor explosividad".

El parricida, que cuenta en la actualidad con 36 años, mató a su mujer y sus dos hijos a martillazos mientras dormían y después continuó con un amigo la noche en varios clubes de alterne. Al ser detenido no explicó por qué lo hizo y ahora, según su abogado, podría ser inimputable "porque su estado mental estaba alterado de tal forma que carecía por completo de inteligencia y voluntad".