A final de año habrá unos tres millones de televisores para TDT

El impulso de la televisión digital terrestre (TDT) y la llegada de nuevos canales está teniendo un efecto perverso en España: muchas comunidades de vecinos han visto la necesidad de arreglar la antena comunitaria para ver bien la televisión, pero se conforman con sintonizar las señales analógicas y dejan para más adelante los canales digitales, que requieren decodificador. Se consigue así ver mejor la televisión, incluida La Sexta, a través de los canales analógicos de siempre.

Al problema de la TDT por la falta de cobertura y la necesidad de un descodificador digital cuando la antena está adaptada, cabe añadir un escollo más: la falta de contenidos populares en estos canales.

Jesús Casado, representante de la TDT en Asimelec, la asociación de los importadores de equipos electrónicos, reconoce que, tras la euforia navideña, desde febrero se ha lentificado la venta de TDT.

Asimelec calcula que a finales de 2005 había en España 950.000 descodificadores. En el primer trimestre se han vendido 400.000 más, y en el segundo se prevén 600.000 aprovechando el tirón del fútbol. A final de año habrá un parque de 2,5 millones de descodificadores digitales, aparte de los televisores que lo integran y que podrían representar medio millón más.

Que se disponga de descodificador no significa que se use. La consultora TNS (Sofres), que mide la audiencia televisiva, calcula que en abril tan sólo el 1,8% de la audiencia era a través de la TDT. El 84% vio la televisión en los canales tradicionales, el 8,5% por cable, el 3,8% por Digital+ y el 1,3% por satélite analógico.

Renovación de antenas colectivas

Lo que ha aumentado es la renovación y adaptación de las antenas colectivas. De octubre a febrero se realizaron unas 1.200 instalaciones de antenas comunitarias, más del doble que en el resto de 2005. Ahora se ha bajado el ritmo a unas 800. Miguel Ángel García Argüelles, gerente de Fenitel, la federación de instaladores de telecomunicaciones en España, destaca que ahora la principal preocupación de las comunidades de propietarios es tener una instalación de antena en condiciones. "El objetivo es ver bien la televisión, no la adaptación precipitada a la TDT".

El 40% de los edificios con más de cinco años de antigüedad requerirán modificar el cableado, según Fenitel. En el 60% restante es suficiente con modificar la cabecera, que cuesta entre 50 y 100 euros.

El principal problema es la complejidad de la recepción de la TDT y que requiere personal cualificado. Los canales de TDT se emiten a las frecuencias más altas del espectro, cuya señal se atenúa muy rápidamente con la distancia. Si la señal recibida es muy débil o el cableado del edificio está muy deteriorado cuesta ver la TDT.

En el 70% de la población que tiene teóricamente cobertura de La Sexta (cadena que junto con Canal+ televisará el Mundial de fútbol), lo más sencillo para las antenas colectivas es poner un amplificador de canal correspondiente a las emisiones de esta cadena en analógico. Cuesta menos de 100 euros, porque se trata de añadir un amplificador en la cabecera de la antena colectiva. No hace falta cambiar nada de la instalación común y, en principio, se debería ver la señal con una calidad parecida a los otros canales analógicos. También se puede pedir a la cadena que venga alguno de sus instaladores autorizados y haga la adaptación gratuita. Siempre que haya cobertura de La Sexta en el inmueble correspondiente.

Si también hay cobertura de TDT, se puede aprovechar para adaptar la antena para recibir los canales en digital. Cada vecino necesitará entonces un descodificador digital.