Polémica celebración del director de Juventud

El director general de Juventud del Gobierno de Cantabria, Raúl Gil, ha sido condenado por desobediencia leve a la autoridad y a pagar una multa de 300 euros, tras un incidente con la Policía Local de Santander, mientras celebraba con un nutrido grupo de jóvenes seguidores del Barça la victoria del equipo en la final de la Champions. La vicepresidenta de Cantabria, la socialista Dolores Gorostiaga, ha abroncado a su director general asegurando que "hay cosas que los jóvenes no deben hacer, y menos el Director General de Juventud". A pesar de la reprimenda pública, Gorostiaga no le ha permitido renunciar a su cargo y ha pedido que no se dé al incidente más importancia de la que tiene. Sucedió la noche del pasado miércoles alrededor de la una de la madrugada, cuando el responsable de Juventud del Ejecutivo cántabro celebraba en la céntrica plaza de Cañadío de Santander la victoria del Barcelona en la Copa de Europa, junto a otros jóvenes aficionados. Raúl Gil fue el único denunciado por la Policía Local. El juez José Hoya declara probado en su sentencia que "varias personas" se dirigieron a los dos policías que coordinaban las fuerzas de Policía Local y Policía Nacional "con ánimo de provocar" y, entre otras cosas, les dijeron: "Sois una Policía de mierda, os vais a enterar el 7 de mayo" y "Quien tenga un hijo subnormal, que lo meta a Policía Nacional". "El director general de Juventud era esa noche Raúl Gil, que se estaba divirtiendo con una serie de amigos, mientras celebraba la victoria del Barcelona. Lo estaba haciendo como lo hacían miles de jóvenes en nuestro país y, en ese momento, no se acordó de que, además de Raúl Gil, era el director general de Juventud", recalcó Gorostiaga. La vicepresidenta cántabra recordó que Gil fue el único de los congregados esa noche en Cañadío que fue denunciado, pero rechazó valorar ni la actuación de la Policía ni la sentencia.