La letra, con Forges entra

El humorista Antonio Fraguas Forges (Madrid, 1942) ha cambiado el refrán y sentencia: "La letra, con sonrisa entra". Siguiendo esta aseveración, Forges se sentó a dibujar y el resultado es Historia de aquí. La Guerra inCivil (desde el desastre del 98 a la II República), un tomo de 244 páginas con el que ha pretendido mostrar "el caminar común de nuestros antepasados". Y es que por diferencias políticas Forges no está dispuesto a que el fuet o las judías de Tolosa dejen de ser españoles, y alto y claro lo dijo ayer en la presentación de su libro en Madrid. "Y qué pasa con el aurresku? ¿Alguien se imagina a Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, recibiendo a un dignatario con una pareja bailando el chotis?". Junto a él, se sentaron en la mesa tres políticas amigas entre sí: la ministra de Cultura, Carmen Calvo, la vicepresidenta primera del Congreso, Carme Chacón, y Beatriz Rodríguez Salmones, portavoz de Cultura del PP en la Cámara. "Su presencia hoy aquí es garantía de que las cosas que se cuentan en este volumen no se van a repetir. Las mujeres no van a permitir que haya más guerras", predijo Forges. Rodríguez Salmones le agradeció que sus viñetas "tengan una posición clara y a veces radical pero que nunca hiere". Y las políticas socialistas, por su parte, recordaron que hace tres semanas se propuso en el Congreso la creación del Premio Nacional de Cómic y que por fin en algo se alcanzó la unanimidad. Con Forges quisieron estar también Santiago Carrillo, Alicia Moreno, Lorena Berdún y muchos otros, que no pararon de reír cuando el viñetista recordó su encuentro en el Palacio del Pardo con Franco cuando a éste se le rompió el televisor y Forges, por entonces chico de los recados de Televisión Española, acudió raudo y veloz con un equipo a repararlo: "Me pareció un besugo, frío como un pez".-