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Reportaje:

Más pelota para las mujeres

El proyecto Emakumea Pilotari intenta fomentar la participación femenina en los frontones

Eleonora Giovio

"En Guipuzcoa hay más que frontones", dice Maider Mendizabal, coordinadora de Emakumea Pilotari [La mujer a la pelota], un proyecto impulsado por la federación de pelota para promocionar la participación femenina en este deporte, que parece ser exclusivo de los hombres. Y es que cada pueblo guipuzcoano tiene un frontón y hay algunos que llegan a tener incluso más de tres o cuatro. Ninguno prohíbe la entrada a las mujeres. Sin embargo, el número de federadas en las distintas modalidades de pelota que hasta hace seis años alcanzaba una cifra de 81, ahora es de 40. Una miseria, comparado con el número de licencias masculinas: 1.398. Y de esas 40 ni siquiera todas juegan. En la federación de Guipúzcoa, sólo hay cinco equipos femeninos que reúnen entre 15 y 20 mujeres."

"Algunos padres les dicen a sus hijas que el deporte no aporta nada y que se centren en los estudios"

"Cuando las chicas son pequeñas juegan con los chicos, pero cuando van creciendo los clubes no hacen un trabajo específico con ellas", asegura Mendizabal, que empezó a jugar en la modalidad de pala con 13 años y que cree que el problema principal es la falta de relevo. "No han entrado chicas jóvenes". De las 20 federadas que juegan, solamente seis tienen una edad entre 18 y 22 años.

"La falta de relevo se debe a la educación de los padres: algunos le dicen a sus hijas de 17 años que el deporte no aporta nada, que lo dejen para dedicarse a los estudios", explica resignada Garbiñe Tijero, una de las 40 federadas que quedan. Tiene 40 años y lleva 15 jugando a la pelota. Trabaja como monitora en el proyecto. "Eso de los padres es absurdo. Una cosa no tiene porque quitar la otra", afirma. "Yo seguí jugando durante la universidad e incluso llegué a jugar y a entrenarme cuando estaba embarazada", dice enérgica. Está orgullosa de que su hija, de 10 años, haya heredado su pasión por la pelota. Aparte de informática, Tijero es entrenadora escolar dentro del proyecto.

Éste tiene tres niveles: El escolar, el federado y el recreativo. El escolar, es sin duda alguna, la parte estrella de Emakumea Pilotari. En ello trabajan, además de la coordinadora, veinte monitoras y algún técnico de la federación. "Los monitores van a los colegios y organizan cuatro sesiones de pelota con las chicas de entre 10 y 17 años. El objetivo es que las chicas prueben este deporte tengan una sesión de entrenamiento una vez a la semana. Si les gusta y quieren seguir se crea una escuela de pelota", explica Mendizabal.

"Hemos dividido Guipúzcoa en cinco zonas -Deba, Urola, Tolosaldea-Goierri, Donostialdea y Bidasoa- y de cada una de ellas hemos escogido dos pueblos bastante poblados y con cierta tradición de pelota", añade. Gracias al proyecto, se han creado cuatro escuelas. Y en los pueblos donde ya existía una, se ha intentado aumentar el número de chicas que acuden a ella. El primer fin de semana de marzo se organizó en Hernani un campeonato guipuzcoano escolar de pala. Todo un logro ya que se apuntaron 45 equipos y alrededor de 130 niñas en las categorías de alevín, infantil y cadetes. "Cuando se acabe la edad escolar, si hay chicas que se lo quieran tomar más en serio, se les ayudará en la segunda parte del proyecto", explica. "Por ahora, por lo que se refiere al deporte escolar las cosas están yendo bastante bien", resume.

Tijero está de acuerdo con ella: "El proyecto es bueno, porque a parte de organizar las sesiones de entrenamiento, organiza también los campeonatos, que es lo importante", asegura.

Dentro del deporte federado, a parte de un grupo de tecnificación de trinquete, se ha creado un comité de la mujer que intenta recoger los puntos de vista de los clubes y de las pelotaris sobre los distintos problemas de las mujeres dentro de la pelota. El tercer y último nivel del proyecto es el recreativo, que afecta a las mujeres mayores de 30 años. "El objetivo es conseguir que no abandonen la pelota por el trabajo o la vida familiar. Como van a gimnasia de mantenimiento que vayan también a echarse un partido de pelota una vez a la semana", espeta Mendizabal. Para conseguirlo se están juntando chicas que tienen el mismo nivel de juego y que, con el apoyo de un monitor, pueden seguir yendo a los frontones. "Si una es muy buena y la otra es muy mala, acabarán aburriéndose, pero si se enfrentan dos del mismo nivel, no habrá problema", dice.

Emakumea Pilotari fue aprobado en diciembre de 2004, pero se puso en marcha el año pasado. Costó 140.000 euros. La Diputación de Guipúzcoa financia más de la mitad del presupuesto, mientras que los ayuntamientos han puesto entre 3.000 y 6.000 euros. "Sabemos que las mujeres y las chicas juegan, por eso intentamos promocionar la participación femenina", afirma Mendizabal con entusiasmo.

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Sobre la firma

Eleonora Giovio
Es redactora de sociedad especializada en abusos e igualdad. En su paso por la sección de deportes ha cubierto, entre otras cosas, dos Juegos Olímpicos. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS; ha sido colaboradora de Onda Cero y TVE. Licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Bolonia y Máster de EL PAÍS.

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