La dirección regional del PP evita implicarse en la defensa de Zaplana tras la denuncia socialista

La dirección regional del PP, que preside Francisco Camps, ha evitado implicarse más allá de lo estrictamente necesario en la defensa de Eduardo Zaplana tras la denuncia socialista en la que se relaciona al portavoz del PP en el Congreso con el cobro de comisiones en Terra Mítica. La secretaria regional, Adela Pedrosa, eludió dar respaldo a Zaplana y se limitó a señalar que todo era "una caza de brujas". El vicesecretario Ricardo Costa emitió por la tarde un comunicado más duro exigiendo disculpas al PSOE después de que las dos consejeras zaplanistas saliesen en defensa del portavoz.

Pedrosa: "No voy a añadir nada más. El portavoz ya dijo todo lo que tenía que decir"

La número dos del PP valenciano, Adela Pedrosa, no quiso entrar en consideraciones sobre la denuncia socialista que implica a Zaplana con un supuesto cobro de comisiones por la adjudicación de obras en Terra Mítica. Pedrosa, en un encuentro con los medios de comunicación para explicar el contenido de la convención que realizarán los populares valencianos para proclamar a Francisco Camps candidato a la Generalitat, se limitó a señalar: "Esto es una caza de brujas. No voy a añadir nada más". "El portavoz [Zaplana] ya dijo ayer todo lo que tenía que decir", sentenció.

Zaplana tomó el pasado viernes por la tarde la sede regional del PP en Valencia para defenderse de la denuncia presentada por los diputados socialistas Antoni Such y José Camarasa. Denuncia en la que se aporta la grabación de una conversación con dos contratistas de Terra Mítica que vinculan a Zaplana con el cobro de comisiones.

El portavoz del PP en el Congreso eligió la sede de su partido para defenderse. Allí llegó arropado por buena parte de sus partidarios, entre los que estaban los presidentes de las Cortes, Julio de Miguel, y de la Federación Valenciana de Municipios, Miguel Ortiz; la consejera Alicia de Miguel, el congresista Vicente Martínez Pujalte, y los diputados autonómicos Elvira Suances, Manuel Gómez y Felipe del Baño, entre otros cargos, a los que se sumó parte del equipo de Zaplana procedente de Madrid.

El vicesecretario regional del PP, Ricardo Costa, que esperaba a Zaplana para atenderle en lo que necesitase se vio desbordado por la situación. "Ricardo, tenemos que hablar, vamos al despacho", le conminó el portavoz popular que entró con todo su séquito antes de comparecer ante los medios de comunicación minutos más tarde. La última comparecencia pública de Zaplana en la sede valenciana del PP se produjo coincidiendo con el primer aniversario del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, cuando todos los cabezas de lista populares -el portavoz fue cabeza de lista por Valencia en 2004- ofrecieron su propia valoración política. Ya entonces se produjo un incidente al vetar Zaplana la presencia de Ricardo Costa en la rueda de prensa.

Tras la agitada jornada del viernes, ayer fueron las dos consejeras zaplanistas del Consell que preside Francisco Camps las que madrugaron para defender la figura del portavoz en el Congreso.

La consejera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, calificó de "vergüenza" la actuación de los dos diputados socialistas que han presentado la denuncia y achacó la misma a una "persecución política contra Zaplana porque es un gran político y les molesta". "No es la primera vez ni la última que existe una caza y una persecución contra Zaplana", dijo la consejera, que añadió: "Estoy muy orgullosa de Eduardo Zaplana, creo que es una personalidad política extraordinaria y por eso les preocupa, pero llegar a estos extremos es una vergüenza".

Gema Amor, consejera de Cooperación, tachó de "intolerables e indignas" las acusaciones contra Zaplana. La consejera mostró su indignación por la "persecución a la que se han prestado los dos diputados de las Cortes, en connivencia con su líder, Joan Ignasi Pla, y sus jefes de Madrid, con el único objetivo de intentar desprestigiar a quien sí ha sabido defender mejor que nadie los intereses de la Comunitat Valenciana". "Es absolutamente bochornoso que dos diputados que dicen representar a los valencianos den crédito a dos personas que al parecer tienen como único objetivo obtener beneficios económicos a través de sus declaraciones", sentenció.

Las manifestaciones de las consejeras -únicos miembros del Consell que se han pronunciado hasta ahora- obligó al vicesecretario regional del PP, Ricardo Costa, a emitir un comunicado más duro contra el PSOE y a defender explícitamente a Zaplana. En su escrito, Costa reclamó a Pla que "de forma inmediata pida disculpas a todo el PP y a Zaplana".

Costa aseguró mostrarse absolutamente indignado y acusó a los socialistas de intentar montar un juicio paralelo y de desprestigio personal del portavoz del PP en el Congreso "sin ningún tipo de pruebas" y en base a "artes que deberían estar absolutamente erradicadas por higiene democrática".