La Bienal de Flamenco inicia una nueva etapa con "más solidez"
La Bienal de Flamenco de Sevilla, que se celebrará del 13 de septiembre al 15 de octubre, inicia una nueva etapa con "menos estrenos, pero más solidez en la oferta", aseguró ayer su director Domingo Gutiérrez, quien se estrena en esta 14ª edición que se centrará en el baile. Vicente Amigo, Eva Yerbabuena, Dorantes, Diego el Cigala e Israel Galván son algunos de los artistas que participan en el festival.
Durante 32 días -frente a los 39 de la edición anterior- ofrecerá 56 representaciones de 40 espectáculos, siete de los cuales son estrenos absolutos. Andalucía, el flamenco y la humanidad, un montaje que dirige el bailaor y coreógrafo Mario Maya y produce la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco inaugurará esta nueva etapa del festival el 13 de septiembre en el Real Alcázar. El montaje, el único que se ha programado en el Alcázar, será estreno en su versión teatral, ya que antes se presentará al aire libre en Granada. Las obras que se están realizando en el teatro de la Maestranza han limitado su uso a la gala de clausura, la única producción que ha encargado la Bienal y que girará en torno a la bailaora Manuela Carrasco.
Saura inspira el programa
La nueva etapa del festival cuenta con un cartel del cineasta Carlos Saura, una imagen "que inspira la filosofía de la programación", en palabras de Gutiérrez. "Para mí Sevilla ha sido un centro de trabajo extraordinario, creo que toda mi vida es un flamenco colateral", bromeó ayer Carlos Saura.
Entre los estrenos destaca el espectáculo Tierra de calma, basado en el último disco del cantaor Miguel Poveda; Mujeres de Lorca, que presenta la Compañía de Danza Flamenca de Carmen Cortés, o Cuatro guitarras y una voz, con la cantaora Esperanza Cortés. "Los 26 años de existencia de la Bienal han ayudado a generar un tejido industrial en torno al flamenco; sin embargo su entorno ha cambiado desde su nacimiento y por eso la Bienal debe cambiar su objetivo. Entonces no existía el festival de Jerez, la Unión no tenía la calidad que ha alcanzado ahora, al igual que le ocurría al Concurso Nacional de Córdoba. Lo que queremos es que la Bienal se convierta en el mascarón de proa de las grandes programaciones flamencas del mundo; Sevilla debe ser al flamenco, lo que Venecia es al arte contemporáneo", explicó Domingo González.
El director insistió en que el público podrá conocer todo lo nuevo que sucede en el baile flamenco, "aunque no estarán todos los artistas, es imposible, sí podrán verse todas las tendencias y estilos del baile", añadió. El festival, organizado por el Ayuntamiento de Sevilla y que cuenta con la colaboración, entre otros, de la Consejería de Cultura y el Ministerio, tiene un presupuesto de cerca de 2 millones y medio de euros, una cantidad "algo menor" que en la última edición porque se ha restringido la programación. Los teatros Lope de Vega, Central y Alameda; además de los escenarios al aire libre del Auditorio y Hotel Triana serán sus principales escenarios.
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