Moratinos pide a Qatar "coherencia" sobre Hamás
El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que ha acompañado a los Reyes en su visita a Qatar, sostuvo ayer ante su homólogo qatarí, Hamad bin Jasim bin Jabor Al-Thani, que es preciso mantener la "coherencia" en la relación con Hamás y coordinar la presión sobre el nuevo Gobierno radical palestino para que renuncie a la violencia, reconozca al Estado de Israel y reanude el proceso de paz.
Qatar mantiene más relaciones con Israel que la mayoría de sus vecinos, pero no renuncia a seguir financiando a Hamás, a pesar de la decisión de EE UU y la UE de canalizar sus ayudas por vías alternativas al Gobierno palestino. El rico emirato acaba de aprobar una ayuda adicional de 50 millones de dólares. Según fuentes diplomáticas, el ministro qatarí le explicó a Moratinos que los fondos son para la Autoridad Nacional Palestina (ANP). El problema es que las autoridades de Doha consideran que el Gobierno es parte de la ANP, mientras que Europa identifica a la autoridad con su presidente, Mahmud Abbás, y propone que todas las ayudas vayan a éste. Moratinos y Bin Jasim estuvieron de acuerdo en la necesidad de potenciar el papel institucional del presidente palestino.
Irán fue otro tema del desayuno de trabajo que los dos ministros celebraron ayer. Qatar, que tiene fe wahabita, como Arabia Saudí, aunque sin los rigores y extremismos religiosos del país vecino, mantiene buenas relaciones con la fortaleza chiíta y un empeño mayor aún si cabe que el de la UE porque el contencioso nuclear se resuelva pacíficamente. El ministro expresó el deseo de que Europa se comprometa para que se alarguen al máximo los plazos de la diplomacia y se pueda seguir buscando un arreglo que satisfaga a todos, incluido Irán, y evite las sanciones.
No aislar a Siria, sin dejar de garantizar la autonomía y estabilidad de Líbano, fue otro objetivo compartido durante esta conversación, en la que el ministro español percibió buenas señales de que las aspiraciones españolas de tener una mayor presencia económica en Qatar puedan concretarse finalmente.
Los Reyes cumplieron un programa privado, vinculado a esa amistad personal con los soberanos qataríes. Acompañados por el emir, Hamad bin Jalifa Al-Thani, y su esposa, Mouzah bin Nasser Al Missned, pasearon durante casi dos horas por el pequeño zoco tradicional reconstruido en Doha, donde el Rey y el jeque posaron para que les fotografiaran los escasos turistas, mientras la Reina y la jequesa hacían compras. Ambas parejas almorzaron luego a solas. Don Juan Carlos y doña Sofía emprendieron viaje de regreso a Madrid a primera hora de la tarde.
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