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La entidad pide financiación pública para sus actividades

"El FAD ha dejado de ser sólo una entidad que trabaja para sus socios, que también, y quiere convertirse en el interlocutor del país con relación al diseño y la arquitectura", indicó ayer Óscar Guayabero, vicepresidente del FAD, durante la presentación del programa de actuaciones de la entidad para los próximos cuatro años.

A partir de esta idea central, la entidad ha programado diversos proyectos, que incluyen una base de datos de diseño con información sobre los creativos, nacionales y extranjeros, que trabajan en Barcelona; la puesta en marcha de una trienal de arte, diseño y arquitectura que organizarán en colaboración con el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba) y el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) y que tomará el relevo de la desaparecida Primavera del Diseño, y una web pensada para servir de punto de encuentro y debate sobre la actualidad urbana. También prevé renovar su imagen gráfica y presentó un programa de exposiciones amplio que incluye la posibilidad de presentar una versión ampliada de la exposición On-site new architecture in Spain, que hasta el 1 de mayo puede visitarse aún en el MOMA de Nueva York.

"Todo este programa exige una reestructuración profunda del FAD. Siempre hemos sido una entidad privada sin ánimo de lucro que se financia con las cuotas de sus socios y el patrocinio, pero lo que no queremos es tener pérdidas", señaló Beth Galí. "Vamos hacia una mayor intervención pública, un tipo de entidad mixta que en el futuro pueda integrarse o convertirse en el embrión del Museo del Diseño que se construirá en Glòries", añadió Galí.

"Para conseguir esto hemos activado la Fundación FAD, que ya existía pero no estaba funcionando, y que puede ser la manera de vincular al FAD como entidad privada a las instituciones públicas. El proyecto ya está sobre las mesas de los políticos", añadió. En principio se pide la implicación de la Generalitat, la Diputación y el Ayuntamiento de Barcelona. "Nos atrevemos a pedir dinero público cuando las actividades que hacemos tienen vocación pública", indicó Óscar Guayabero, que resaltó que éste se concentra en el caso de actividades destinadas a los jóvenes o a programas más experimentales que tienen difícil patrocinio en el entorno privado. "No somos una estructura gremial, sino cultural, y por eso que pensamos que las instituciones tienen que ser más generosas".

El FAD es conocido sobre todo por sus premios de arquitectura y, precisamente, este año también se han cambiado las bases -se ha incluido una nueva categoría dedicada al pensamiento y la crítica, además de ampliar el ámbito de las otras cuatro categorías- y las fechas, ya que este año se fallará en otoño.

La entidad celebra esta noche su asamblea anual, que incluye una fiesta con la entrega de una copa, diseñada en esta edición por Antoni Miralda, a los premiados con la medalla de oro del FAD. Este año ha recaído en el dibujante Andrés Rábago, conocido como El Roto: la plataforma Salvem Can Ricart; la Fundación Signes; el cineasta Joaquim Jordà; Roser Melendres, fundadora de la escuela EATM de diseño de moda, y el diseñador José María Cruz Novillo. Todos los socios recibirán también una obra gráfica diseñada por Joan Fontcuberta.

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