Toledo basa su programa en la internacionalización de la Jaume I y en la continuidad de su mandato

"Una Jaume I por hacer sobre una Jaume I consolidada: Continuidad y renovación". Ésta es la primera de las trece líneas sobre las que el rector de la Universitat Jaume I de Castellón, Francisco Toledo, ha elaborado su programa electoral para ser reelegido. Con la tranquilidad que otorga no tener ningún oponente, Toledo presentó ayer las 180 propuestas de su candidatura al claustro y al rectorado en las elecciones se celebrarán el 11 de mayo y a las que concurre a través del Projecte Universitari Convergent. Fomentar, promocionar, reforzar, potenciar, considerar, promover, estudiar o procurar, son los verbos con los que comienzan la mayoría de sus propuestas, entre las que también se incluyen compromisos concretos como el de la puesta en funcionamiento del parque científico de la Jaume I (que no depende exclusivamente de la universidad), la homologación salarial del profesorado contratado indefinido a las figuras funcionariales que tiene asignadas las misma funciones, o la construcción de una "casa del estudiante", donde situar las actividades del consejo de estudiantes y de las asociaciones estudiantiles.

El rector presentó ayer el programa y hoy presentará el equipo rectoral con el que se presenta a las elecciones, con una renovación próxima al 50%. Entre los candidatos de su equipo se mantendrá la paridad y el equilibrio de representantes entre los centros y facultades aunque, al parecer, Toledo prevé incrementar el número de vicerrectores que, hasta ahora, era de diez.

Incrementar la participación de los estudiantes en el proceso electoral es uno de los retos que se ha planteado el candidato para antes de las elecciones, tras las que pretende conseguir una universidad generadora de "progreso y bienestar". Para ello, apuesta por la internacionalización de la institución, marcando la necesidad de aprovechar los próximos cuatro años para dar un "fuerte impulso" que busca aumentar la movilidad de estudiantes en programas de intercambio; mejorar el conocimiento de idiomas de los alumnos, profesores y personal de administración; fomentar las aulas internacionales, o promover la universidad como sede de congresos internacionales, todo ello bajo el epígrafe de "la universidad Internacional de Castellón", en clara alusión al proyecto de la universidad internacional que promueve la Generalitat Valenciana y con el que se ha mostrado muy crítico.

El programa se presenta con el argumento de la gestión desarrollada por el propio rector y las propuestas de futuro, entre las que figura llevar adelante un modelo cultural, y se fundamentan en la universidad como generadora y foco de transmisión.