El 52% de los indigentes atendidos el pasado invierno eran extranjeros

La concejal de Empleo y Servicios a la Ciudadanía, Ana Botella, presentó ayer el balance de la campaña contra el frío, en el que desveló que el 52% de los sin techo atendidos eran extranjeros. La campaña se enmarca en el Programa Municipal de Atención a Personas sin Hogar y este año ha ayudado a 1.957 indigentes. Según Botella, la oferta de plazas en albergues es superior a la demanda.

La concejal explicó que entre el 25 de noviembre de 2005 y el pasado 31 de marzo, el Ayuntamiento de Madrid atendió a 1.957 personas. El proyecto ha contado con un presupuesto de casi un millón de euros, un 10% del dinero que el Consistorio dedica a la atención del colectivo de personas sin hogar.

La oferta es superior a la demanda. Todos los indigentes que no hayan querido pasar la noche al raso, según el Consistorio, han podido hacer uso el pasado invierno de albergues y dispositivos especiales para hacer frente a las bajas temperaturas. O al menos eso dice el Ayuntamiento que se desprende de los datos de ocupación, que ha sido del 92%. "Se ha contado con la capacidad necesaria de acogida para las demandas de atención que se han producido", explica Botella.

Sin embargo, la concejal no quiso, por desconocerlos, facilitar datos del número de indigentes que puede haber en la actualidad en las calles de la capital. Se deduce, pues, que muchas de las personas sin hogar, deciden voluntariamente no ingresar en ninguno de los centros.

Respecto a la procedencia de los extranjeros atendidos, Botella destacó que este año se ha percibido un notable aumento de subsaharianos. El 18% del total procedía de África, mientras que el 15% lo eran de distintos países europeos, especialmente rumanos, polacos o de antiguos países de la extinta Unión Soviética.

El 40% de las personas atendidas en la campaña tenía entre 30 y 40 años. Un 78% eran hombres, y un 22% mujeres. "Ellas pierden con mayor dificultad el contacto con las redes familiares y sociales", explicó la edil. Además, este año se han detectado a 140 personas sin hogar que viven en esta situación de forma permanente. "Nuestro interés por las personas sin hogar está presente todo el año, ya que nuestro objetivo es que en la ciudad de Madrid tengan atención social", dijo Botella.

La concejal destacó que el programa municipal no es sólo de carácter asistencial, sino que proporciona acompañamiento y constituye una oportunidad para la incorporación social de esas personas.

Este año, el Ayuntamiento ha aumentado en 385 plazas la capacidad para alojar indigentes durante la campaña de invierno. Esas plazas se suman a las 1.228 estables de atención a las personas sin hogar, y a las de las pensiones, que han pasado de 3.500 estancias a 4.000. "Éste es un recurso muy interesante, que usan mucho los equipos de la calle", explicó. En estas fondas han sido atendidas 32 personas.

Botella subrayó que el albergue municipal de San Isidro, así como otros centros que colaboran en esta tarea con el Ayuntamiento, no llegaron en ningún momento al 100% de ocupación. A la vez recordó que "siempre que las temperaturas bajan de cero grados se incrementa la capacidad de acogida con 59 camas de emergencia y se intensifica la intervención de los equipos que trabajan en la calle".

En la asistencia a personas sin hogar durante los meses invernales han participado el Samur Social; los centros de Baja Exigencia; el centro de acogida de San Isidro; el centro de acogida de Pabellones de Casa de Campo; Dispositivo Alternativo; el Centro Municipal de Urgencia Social (Cemus) y centro de acogida de inmigrantes, entre otros.