El 30% de los edificios de Barcelona ha recibido subvenciones del Ayuntamiento para su rehabilitación

En Barcelona hay unos 90.000 edificios de viviendas. De éstos, cerca de 30.000 (el 30%) han recibido algún tipo de subvención municipal para su rehabilitación y mantenimiento desde que hace 20 años se puso en marcha el programa Barcelona, posa't guapa. El año pasado, 3.806 comunidades de propietarios pidieron al Instituto Municipal de Paisaje Urbano acogerse a las subvenciones, que pueden llegar a cubrir hasta el 20%, como máximo, del coste de la rehabilitación.

Cerca de la mitad de las actuaciones sirvieron para mejorar el aspecto de las fachadas. Las otras reformas más comunes se dieron en patios de luces (652), terrados y cubiertas (411) e instalación de ascensores (252). Los distritos del Eixample, Ciutat Vella y Gràcia coparon casi la mitad de las intervenciones. En total, la inversión del consistorio durante 2005 alcanzó los siete millones de euros.

La Administración subvencionó la sustitución de 96 bosques de antenas por una única antena de televisión e invirtió 100.000 euros en la instalación de placas solares y de sistemas de aislamiento térmico y acústico en las viviendas.

Además las rehabilitaciones, el instituto municipal se encarga de regular la publicidad exterior. Según explicó ayer el segundo teniente de alcalde, Jordi Portabella (ERC), la Administración revisó en 2005 "el 100%" de los 1.145 carteles publicitarios que hay repartidos por toda la ciudad. De ellos, 100 tuvieron que retirarse, porque incumplían la ordenanza municipal en esta materia.

Cuando en una finca se ejecutan obras de rehabilitación, está permitido que los operadores fijen anuncios sobre los andamios. Pero el Ayuntamiento les cobra para compensar la "contaminación paisajística" que provocan. Sólo el año pasado, el instituto municipal recaudó por este concepto 1,8 millones de euros. "Es lógico que al menos su presencia repercuta en la mejora del patrimonio urbano", explicó Portabella.

Las farmacias tampoco se libran de cumplir la normativa sobre rótulos. Según anunció el segundo teniente de alcalde, el instituto municipal y el Colegio de Farmacéuticos firmarán un convenio para que, en un periodo de dos años, los rótulos bandera (en forma de cruz) de las farmacias se ajusten a la ordenanza, ya que ahora las dimensiones de muchos de ellos exceden lo permitido. "Cada vez se instalan cruces más grandes; es una escalada imparable", subrayó Portabella, quien apostó además por que las farmacias reduzcan la intensidad y el ritmo de parpadeo de sus luces.