Simancas critica la ineficacia de las pulseras antimaltrato

El secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Rafael Simancas, denunció ayer que la "pulsera antimaltrato" que ha impulsado el Gobierno de Esperanza Aguirre no es "efectiva" y que hoy "sólo la lleva un maltratador, como alternativa al cumplimiento de una condena de cárcel". Simancas defendió una "adecuada" protección de las víctimas de violencia doméstica y reclamó una política propia de seguridad ciudadana.

"La pulsera antimaltrato no es una medida efectiva. Sólo un maltratador la lleva en Madrid y, al parecer, se la han colocado como alternativa de una pena de cárcel", aseguró ayer Simancas. "No sé si es muy efectivo y no quisiera faltar el respeto al poder judicial, pero creo que ése no es el camino", sentenció. El dirigente socialista dudó ayer de la eficacia de estos mecanismos, que se colocan a los agresores de violencia doméstica para advertir a las víctimas de su proximidad.

Simancas indicó que para hacer frente a este tipo de violencia "no bastan las estrategias policiales", y agregó que "el camino para combatirla es la protección efectiva a la víctima y las políticas en favor de la igualdad".

Simancas manifestó que "lo que hace falta en Madrid son centros de recuperación integral para las mujeres maltratadas, y esto se ha venido desmantelando en Madrid en los últimos años".

El líder socialista reclamó a la Comunidad que elabore una "estrategia propia de seguridad ciudadana". Simancas apuntó que "no basta con aportar recursos a unos cuantos ayuntamientos escogidos, adquirir helicópteros de segunda mano que se caen y gastarse el dinero público en campañas propagandísticas que mienten".

Simancas propuso al Gobierno regional que llegue a un "gran acuerdo" con la Delegación del Gobierno para participar en el plan ITER (plan estratégico de seguridad ciudadana para Madrid) y que garantice policías locales "bien dotados en todos los municipios". El delegado del Gobierno, Constantino Méndez, aseguró que los delitos que más aumentan, la violencia de género y la de los menores, "requieren básicamente de medidas de prevención social".