EU propone la reversión de todos los PAI aprobados al margen de la ordenación urbana

Esquerra Unida del País Valencià celebró ayer una convención programática para trazar las líneas maestras de una apuesta política de "esperanza y confianza", en palabras de Glòria Marcos, cuyo "doble objetivo" es "derrotar al PP y al bipartidismo". Para marcar distancias y entre otras iniciativas, los 300 delegados de la coalición de izquierdas plantearon una nueva ley de ordenación urbanística que incluye la reversión de los Planes de Actuación Integrada (PAI) que se han aprobado al margen de lo previsto en los planes generales de ordenación urbana municipales.

La posibilidad de plantear la construcción de grandes urbanizaciones sobre suelo que ni siquiera se había clasificado como urbanizable en los planes generales de los ayuntamientos afectados es una de las claves de la voracidad urbanística que ha soportado el territorio valenciano en los últimos años. La sucesión de PAI aprobados al margen de las previsiones de crecimiento urbano trazadas por las propias corporaciones muncipales distorsiona cualquier ordenación del suelo. Ante semejante tesitura y, con vocación de abordar los "problemas reales" que afectan a los ciudadanos, la convención de EU planteó una nueva legislación urbanística que incluiría "la desclasificación de terrenos recalificados fuera de los planes generales de ordenación", una medida que paralizaría la urbanización de millones de metros cuadrados en todo el territorio valenciano.

La convención programática acordó también iniciativas relativas a la reindustrialización y al desarrollo de planes integrales de empleo; plantea "duplicar las plazas públicas de Educación infantil" y la "construcción de cien escuelas para niños de cero a tres años en dos años"; "recuperar el control público de los hospitales y centros de salud privatizados por la Generalitat del PP"; crear una "red de viviendas públicas para los sectores sociales más necesitados"; optimizar el uso de los recursos hídricos; o articular "el País Valenciano mediante una ley de comarcalización".

"Todo en la línea de atender los verdaderos problemas de la sociedad y con el espíritu de generar propuestas de gobierno alternativo", según Marga Sanz, coordinadora de la convención y de la confección del programa electoral.

Marcos, la coordinadora general de Esquerra Unida, aprovechó la convención para arremeter contra la gestión del actual presidente de la Generalitat. "Francisco Camps y su gobierno tienen un discurso absolutamente agotado que corre al bipartidismo, pero que no da solución a los problemas reales de los valencianos", declaró, "y continúa dándole la mano a la corrupción".

Marcos evitó cualquier comentario sobre un posible acercamiento al Bloc Nacionalista Valencià cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas, un debate que han suscitado algunos destacados miembros de la coalición.

Marcos explicó que Esquerra Unida trabaja sobre su "propio programa" y avanzó que lo planteará "sin exclusión" a todas las fuerzas políticas una vez haya sido definitivamente perfilado.