Díez Usabiaga pide al PSOE que cancele "políticas de guerra"

Rafael Díez Usabiaga, secretario general del sindicato LAB, el único organismo legal que tiene la izquierda abertzale, hizo ayer pública la reflexión del sindicato sobre el anuncio de alto al fuego permanente de ETA que consideró una "aportación de enorme alcance político, que expresa una voluntad manifiesta en favor del diálogo y la negociación". Díez ha participado de forma relevante en los anteriores episodios de diálogo de la banda, y reconoció ayer que, esta vez, la situación política es "mucho más madura que en 1998 [en referencia a Lizarra y la tregua] y muchísimo más que en 1989, cuando se produjeron las conversaciones de Argel". "Por eso, supongo que la decisión ha estado muy sopesada y supongo que muy valorada", dijo.

Pero el interés de Rafa Díez ayer fue incidir, sobre todo, en la necesidad de que el PSOE y el Gobierno hagan también su "aportación activa y concreta" a la nueva situación política creada por el anuncio de ETA. El líder sindical destacó que el nuevo escenario "también crea expectativas positivas al propio Estado español" y le instó a superar "una política de voluntades y dar un paso definitorio para construir ese escenario de negociación y acuerdo".

En la misma línea que Batasuna en la víspera, Díez Usabiaga expresó la urgencia que tiene la izquierda abertzale de que se "cancelen las medidas represivas y los condicionamientos de la actuación política", una alusión al levantamiento de la ilegalización que ha impedido a Batasuna tener una actividad política normalizada. "Hay que romper amarras con terapias del pasado con total decisión política", declaró Díez. "Hay que romper amarras con políticas de guerra, políticas de conflicto".

"Prudencia y cautela"

El líder sindical añadió que la sociedad no entenderá que las medidas represivas continúen en la actual situación y aclaró que la izquierda abertzale sostiene que "tras la Audiencia Nacional hay responsabilidades políticas y, en la nueva situación, el PSOE y el Gobierno socialista tendrán que actuar en consecuencia".

Díez Usabiaga respondió a la reacción del presidente Zapatero ante el alto al fuego etarra con las mismas palabras que utilizadas por éste: "Prudencia y cautela". Se negó a entrar en "disquisiciones literarias" al ser preguntado por la diferencia entre un alto el fuego "permanente" como el actual o "indefinido" como el de 1998. "Sé que es de un enorme alcance político", aseguró.

Respecto a la puesta en marcha de una mesa de partidos, Díez Usabiaga no se mostró partidario de establecer plazos mientras los partidos sigan trabajando en la búsqueda los "anclajes sólidos" que, a su juicio, son la garantía para la constitución y resultado de esta mesa, un instrumento fundamental para el acuerdo.