Los socialistas usarán sus enmiendas para equiparar el texto con el catalán

Hoy viernes acaba el plazo para la presentación de enmiendas a la proposición de ley de reforma del Estatuto de Autonomía, un trámite en el que todos los grupos deberán poner boca arriba sus cartas y, en blanco y negro qué es lo que quieren añadir, modificar o suprimir.

La situación más extraña es la que se da en el grupo socialista, que cuenta con mayoría absoluta en la Cámara. El PSOE es el único grupo que ha apoyado todos y cada uno de los 222 artículos y seis disposiciones adicionales del nuevo Estatuto, pero también va utilizar el trámite de enmiendas para modificar el texto.

Muchas de las modificaciones que va a presentar el grupo socialista se deben a que si no presenta enmiendas no dispondría de ninguna percha jurídica para negociar propuestas transaccionales con la oposición, con lo que le dejaría fuera de juego y en brazos de los otros grupos, que podrían vetar la admisión de las llamadas enmiendas in voce.

En este sentido, los socialistas van a registrar hoy un bloque de modificaciones a los votos particulares que, fundamentalmente, el PP presentó a la proposición de ley de reforma estatutaria. De este modo, podrán negociar con el grupo popular durante el trámite de ponencia que comienza el próximo día 30.

Las enmiendas del PSOE se dividen en otros tres bloques: por un lado, recogerán aquellas sugerencias que figuran en el dictamen del Consejo Consultivo en donde se indican redacciones alternativas para eludir posibles roces inconstitucionales posteriores, como puede ser el que se advierte sobre el derecho a la muerte digna, además de otras redacciones incorrectas. También harán caso, pero no sólo porque así lo apunta el Consejo Consultivo, a las recomendaciones para potenciar el papel de los municipios en el nuevo Estatuto. La inclusión de una listado de competencias para los ayuntamientos es uno de los acuerdos alcanzados en días pasados con Izquierda Unida, grupo que se ha convertido, según reconocía un miembro socialista, en "el seguro de vida del Estatuto", ya que sin su apoyo no es posible alcanzar los tres quintos (65 diputados) que requiere la aprobación de la reforma estatutaria.

En otro paquete de enmiendas acumularán las propuestas formuladas por organizaciones sociales durante las comparecencias en la comisión de Desarrollo Estatutario. Entre ellas figuran las recomendaciones que los colectivos feministas hicieron a los ponentes para corregir el lenguaje sexista de la proposición de ley, entre las que figuran iniciativas novedosas como la de llamar a la institución del Defensor del Pueblo, Defensoría del Pueblo.

El cuarto bloque hace referencia a aquellos cambios introducidos a la reforma del Estatuto de Cataluña en la Comisión Constitucional del Congreso y que los socialistas tipifican de "homologación" con el texto catalán. Entre ellas, que también presentará IU, figura el blindaje de competencias para evitar la invasión de la legislación estatal básica a través de disposiciones de menor rango que las leyes orgánicas.