El sindicalista herido sigue con pronóstico "muy grave"

Cyril Ferez, de 39 años, militante del sindicato SUD de Correos, sigue en estado de coma y su estado ha empeorado. Su pronóstico era ayer "muy grave". Los periódicos y las cadenas de televisión reprodujeron ayer las imágenes de los incidentes del pasado sábado, en la plaza de la Nación de París, al final de la gran manifestación, en los que Ferez resultó herido. En ellas puede verse claramente cómo el sindicalista es literalmente arrollado y pisoteado por un grupo de agentes antidisturbios que se enfrentaba a varios manifestantes que les lanzan objetos y a quienes respondieron con gases lacrimógenos.

Las imágenes son fantasmagóricas. El negro de los uniformes de los miembros de las Compañías Republicanas de Seguridad (CRS, antidisturbios) y sus armaduras contrastan con las luces blancas y el fuego. Bajo sus pies está este personaje. Los policías ni siquiera lo miraron. Se retiraron unos pasos y quedó un bulto sobre el asfalto.

Sin embargo, otra imagen tomada antes de la carga policial muestra a Ferez arrodillado en el suelo, con la mirada perdida, mientras a un lado un grupo lanza piedras y todo tipo de objetos contra los CRS, y en el otro, los agentes se preparan para cargar.

Según los bomberos, Cyril Ferez tenía una herida en la cara antes de la carga policial. Le habían intentado convencer para trasladarlo a un hospital. Tenía una tasa de alcohol de 2,7 gramos por litro en la sangre. Cuando finalmente se lo llevaron al hospital, tras convencerle, estaba perfectamente consciente. Llegó al hospital a las once de la noche. A las cuatro de la madrugada entró en coma. El periódico Libération entrevista al fotógrafo, Bruno Stevens, que asegura que Ferez recibió un golpe en la cabeza. "Se cayó como un saco", explica, "y después siguieron pegándole en el suelo, muy, muy fuerte".