Rodar una intriga de crimen y matemáticas

"La peli trata sobre si es posible conocer la verdad absoluta acerca de algo. Porque siempre que investigas, sin querer transformas los acontecimientos". El director Álex de la Iglesia prepara un brebaje de asesinatos y lógica matemática con formato de thriller. En septiembre se muda a Inglaterra para rodar la adaptación de Los crímenes de Óxford, novela de Guillermo Martínez (Bahía Blanca, Argentina, 1962), tal y como contó ayer en el Foro de Proyectos del Festival de Málaga. Pero antes, estas semanas el ácido realizador perfila un reparto para un rodaje en inglés y con estrellas de renombre a la altura de una coproducción europea.

De la Iglesia está acostumbrado a meterse en camisa de once varas con proyectos internacionales como Perdita Durango, y que resultarían osados para el vulgo de los realizadores hispanos. Tras hacerse el productor Gerardo Herrero con los derechos de la novela, Premio Planeta 2003, el director recibió el encargo para su nuevo reto. "Normalmente las ofertas de trabajo no son demasiado interesantes, pero por extraño que parezca, ésta se me antojó apetecible", confesó. Los crímenes de Oxford contará con un reparto británico, excepto la estrella mexicana protagonista, y se rodará en el campus de la ciudad universitaria inglesa, además de interiores londinenses, durante nueve semanas.

La película es una aproximación al 'thriller' desde la lógica y las matemáticas

La historia relata el viaje a Oxford de un estudiante argentino, graduado en Matemáticas, para estudiar Lógica durante un año. Apenas 15 días después de su llegada, la propietaria de la casa donde se aloja aparece asesinada. El profesor Arthur Seldom, amigo de la fallecida, comienza a recibir notas con símbolos, y junto al estudiante acepta el envite y deciden investigar la muerte.

"Es una aproximación al thriller desde la lógica, e intentaré ser fiel al espíritu de la novela", explica De la Iglesia, que como siempre ha dialogado esta historia junto a su guionista habitual, Jorge Guerricaechevarría. "Jorge forma parte de mí desde que tenía ocho años", apunta dichoso. En la trama de misterio, el estudiante busca resolver el asesinato y al mismo tiempo ser aceptado por el profesor, quien estima "que no da la talla", detalla el realizador.

En la novela, Arthur Seldom es uno de los grandes maestros de la Lógica y ha estudiado la distancia que hay entre lo verdadero y lo demostrable, a partir de las tesis de Gödel de los años treinta, y lo ha aplicado a la criminalística. El resultado es una intriga en la más pura tradición inglesa. "Lo más complicado es que hay que trasladar muchas ideas a imágenes. Sobre si es posible conocer una verdad absoluta, película y novela son escépticas al respecto", relata De la Iglesia.

Herrero compró en cuanto pudo los derechos de la novela, que estas semanas disfruta de un éxito de ventas en las librerías inglesas. "El libro me interesó porque siendo un thriller con intriga y asesinatos, habla también de matemáticas y filosofía", cuenta el productor, que ahora intenta involucrar a capital francés e italiano para que el presupuesto engorde.

"A Martínez le fascinan las películas del realizador vasco y está encantado de llevar su novela al cine", añade Herrero.