Rajoy pone bajo sospecha toda la instrucción judicial del 11-M

El presidente del PP, Mariano Rajoy, puso ayer en tela de juicio la investigación judicial y policial del 11-M al conceder verosimilitud a una información en la que se aseguraba que la bolsa de deportes que contenía la bomba que no explotó en los trenes, y cuya desactivación permitió hallar pistas que condujeron a los autores del atentado, nunca estuvo en la estación de El Pozo, pese a lo que afirma la policía. La Fiscalía de la Audiencia Nacional negó ayer que se hayan manipulado las pruebas.

"Ha aparecido un dato que es bueno que se aclare, porque toda la investigación y todo el sumario que está dirigiendo el juez parte de una mochila que estaba en un tren. Ahora se nos dice [en el diario El Mundo] que esa mochila no estaba en el tren. Se lo dice un policía al juez Del Olmo", declaró ayer el presidente del PP. "Si esto se confirma, podría anular la investigación y podría anular el sumario".

El policía al que alude Rajoy no declara que la mochila con la bomba no estuviera en el tren, según el acta judicial, sino que explica que él vio una bolsa de deportes que los bomberos metían en otra bolsa de basura sin saber si contenía una bomba o no, y que ese objeto es distinto al que le enseñaron en la Audiencia Nacional. La mochila que le mostró el juez, según aclararon fuentes de la Audiencia, no es la que realmente se encontró en los trenes de la muerte.

El policía declaró ante el juez que cuando todos los objetos recogidos en la estación de El Pozo llegaron a la comisaría de Vallecas, él no estuvo presente. La Fiscalía de la Audiencia negó ayer que se hubiera manipulado esa prueba, que "fue custodiada de forma permanente por la policía judicial".