Una banda armada perpetra el mayor robo de la historia del Reino Unido
La policía británica los describió como "una banda armada muy peligrosa". El grupo compuesto por al menos seis hombres que puso en riesgo a toda una familia, incluido un niño de ocho años, y a 14 empleados del almacén, cometió en la madrugada del miércoles el que puede ser el robo más importante de la historia del Reino Unido, al llevarse entre 20 y 50 millones de libras (entre 30 y 75 millones de euros) de un almacén de una empresa de seguridad en Kent (sureste de Londres).
La policía confirmó que un hombre de 29 años y una mujer de 31 fueron detenidos ayer en el área de Londres y trasladados a comisarías de Kent, donde son interrogados como sospechosos de conspirar para cometer el atraco. Estas dos detenciones fueron calificadas de "importante avance para la investigación" por el número dos de la policía de Kent, Adrian Leppard durante una conferencia de prensa. Por otra parte, la compañía ha ofrecido tres millones de euros por una pista que lleve hasta los autores del atraco.
Todo empezó a las 18.30 del martes, cuando dos atracadores disfrazados de policías interceptaron el coche en el que viajaba el gerente del almacén. Tras esposarlo se lo llevaron a una granja. Otros dos miembros de la banda también disfrazados de policías se presentaron en la casa del gerente para informar a la familia de que había sufrido un accidente. La mujer y el hijo les acompañaron.
Hacia la una de la madrugada del miércoles, los atracadores condujeron al gerente y a su familia al almacén de Securitas en Tonbridge, a unos 30 kilómetros al sureste de Londres, donde el gerente ordenó a un empleado que les franqueara la entrada.
Una vez dentro, la banda neutralizó a los 14 empleados amenazándoles con sus armas, introdujeron una furgoneta y otros coches y se llevaron el dinero. Al menos 20 millones de libras, probablemente más de 25 y quizás hasta el doble.
El robo recuerda en su ejecución al que cometió otra banda en el Northern Bank de Belfast a finales de 2004, que la policía atribuyó al IRA. En este caso la policía apunta a la delincuencia común. "Es crimen organizado al más alto nivel. Ha sido planeado y ejecutado con precisión militar", dijo Adrian Leppard, alto cargo de la policía de Kent.
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