La presidenta del Constitucional cree que no peligra la unidad de España

La presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, aseguró ayer que la unidad de España no está en peligro y que el alto tribunal está precisamente para garantizarla. Casas se mostró contraria a reintroducir el recurso previo de inconstitucionalidad que pudiese paralizar leyes orgánicas, pero cree que podría configurarse para reformas de estatutos de autonomía así como para las reformas constitucionales.

La presidenta del Tribunal Constitucional garantizó, en un desayuno informativo de la agencia Europa Press, que la unidad de España no peligra porque "existiendo el Tribunal Constitucional, estamos para evitar ese peligro". "El Tribunal defiende la Constitución en su letra y en su espíritu y la unidad de España forma parte de la Constitución". La presidenta del Constitucional recordó que el artículo 2 de la norma fundamental "reconoce el derecho a la autonomía de las comunidades autónomas, regiones y nacionalidades, dentro de la unidad de la nación española".

En cuanto al recurso previo de inconstitucionalidad, que el PP propone en sus enmiendas a la reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, Casas recordó que estuvo incluido en la ley de 1979 y se suprimió en 1985, por su uso "indebido y abusivo".

La presidenta, sin embargo, señaló que dicho recurso podría tener una "configuración muy selectiva" que afectase a las reformas de los estatutos de autonomía y a las reformas constitucionales de tipo procedimental según lo establecido en los artículos 167 y 168. Añadió que, aún con algunas dudas, cree que seria posible reintroducirlo en la ley orgánica del tribunal sin necesidad de modificar la Constitución.

Preguntada sobre si el Tribunal debería pronunciarse sobre el Estatuto de Cataluña "antes o después del referéndum", Casas opinó que, "no existiendo el recurso previo de inconstitucionalidad, evidentemente después del referéndum".

En otro momento negó que, ante una eventual tregua de ETA, los magistrados del Tribunal sean "influenciables" y subrayó la "absoluta independencia y competencia" de todos los magistrados.

María Emilia Casas llamó la atención de los parlamentarios para que la "urgente" reforma de la ley orgánica del Tribunal se produzca con un "amplio consenso" de todos los grupos.