"Es el momento de hacer apuestas para crecer"
La CAM se plantea como objetivo estarpresente en la totalidad del territorio español
La Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) muestra sus buenas notas en 2005 para reivindicarse como uno de los referentes del sistema financiero español. "Disponer desde una región periférica de una estructura como la nuestra (más de un millar de oficinas en todas la comunidades autónomas) que nos sitúa en la cuarta, tercera o quinta posición (según márgenes) de la clasificación de cajas es una hazaña", dice su director general. "Existe en nosotros una cultura muy arraigada de empresa, un sentimiento de hacer las cosas bien, de crecer y creer que tenemos derecho a situarnos en un lugar importante del mercado financiero español".
Roberto López también reivindica un gran mérito de las cajas en su conjunto. "Hemos hecho una reconversión importantísima en el sector, sin reducciones de personal, con planes de prejubilaciones con cargo a las cuentas de resultados, no a la Seguridad Social, sin costarle un euro al contribuyente y, sin embargo, tenemos el sistema financiero más eficiente de Europa en este momento".
"Apostamos por el autoservicio, a través del cajero, de Internet o de la banca telefónica. Ahí hemos hecho un esfuerzo tremendo"
"En el mercado español no quedan prácticamente oportunidades de compra. Desarrollamos un modelo propio que es un modelo de éxito"
Pregunta. La CAM obtuvo en 2005 uno de los mejores resultados de su historia, con casi todos los índices por encima del 20% de crecimiento. ¿En qué medida contribuye la coyuntura actual a la cuenta de resultados?
Respuesta. Estamos disfrutando de un entorno excelente. Estados Unidos y Japón van bien, Europa parece que empieza a ir bien y España ha ido bien. Para nosotros hay dos parámetros fundamentales: que haya creación de empleo y tipos de interés bajos, que hacen que tanto la demanda en general del crédito como la calidad del mismo sea alta.
P. La CAM crece territorialmente. ¿Dónde quiere situarse la entidad en los próximos años?
R. Nuestro plan estratégico apunta a situar la CAM como una de las entidades de referencia en el mercado financiero español. No pensamos en estar fuera del país de forma consistente como la banca, aunque hacemos escarceos en ese sentido. Nos encantaría estar situados entre las tres primeras entidades del país.
P. La competencia es dura.
R. La coyuntura es buena y creemos que puede durar algún tiempo. Por lo tanto, éste es momento de hacer apuestas. La nuestra es muy fuerte en materia de crecimiento para situarnos en la totalidad del Estado español. Hace sólo cinco años teníamos básicamente un carácter regional, muy centrado en la costa este del país, muy fuertes en Alicante y en Murcia. Pero ya somos una entidad de referencia en la Comunidad Valenciana, disponemos de una entidad significativa en Baleares, empezamos a tener una presencia consolidada en Cataluña y este año hemos cerrado con más de 30 nuevas oficinas en Andalucía. En Madrid hay abiertas más de 70 oficinas, y en esa comunidad autónoma vamos a continuar creciendo.
P. También Bancaja, su principal rival, ha obtenido grandes resultados. ¿Hay espacio para ambas entidades?
R. Tenemos un competidor que no se cansa de hacerlo bien. Y eso para nosotros es un estímulo para salir todos los días a intentar hacerlo mejor. Desde el punto de vista del consumidor, esa competencia es tremendamente positiva, porque dispone de dos entidades que en estos momentos están punta de lanza, tanto por capacidad gestora como por sus resultados. Por supuesto que hay espacio para los dos. La CAM está en torno al 4% del total de mercado, y Bancaja, otro tanto. Nos queda, pues, una capacidad de recorrido inmensa. El potencial de crecimiento es enorme cuando dispones de una organización entrenada, lanzada y con una cultura de moral de éxito. Los datos de crecimiento de este año no los hubiéramos soñado en la vida; seguramente con la mitad estaríamos celebrando el éxito.
P. ¿Por qué ha fracasado la corporación financiera con Bancaja?
R. Fue un proyecto que nació en un momento determinado como alternativa a un hipotético proyecto de fusión. Yo creo que la corporación puede dar de sí muchísimo, porque hay sectores de base en la economía, sobre todo la valenciana, que podrían tener representación de las dos cajas. La corporación tiene inversiones en materia de capital riesgo que podría ampliar consistentemente, en la red hospitalaria de la Comunidad Valenciana, que está llamada a crecer, inversiones compartidas en materia de autopistas, que también podrían ampliarse. Hay un camino que recorrer, pero antes debemos cambiar el chip y enfocarla a esa finalidad.
P. Tras perder en la puja por el Banco Atlántico, ¿siguen interesados en una operación de compra de ese calado?
R. En el mercado español no quedan prácticamente oportunidades. Desarrollamos un modelo propio que es un modelo de éxito.
P. Los hipotecarios son los grandes protagonistas del crecimiento. ¿No cree que dependen demasiado de ese tipo de créditos?
R. En estos momentos hay una gran oportunidad de mercado que estamos aprovechando. Pero nosotros tenemos elementos alternativos para crecer. La CAM se ha volcado en crecer en el mundo de la empresa; éramos una entidad focalizada en banca al menor, en clientes particulares, y ahora hemos crecido enormemente en pequeñas y medianas empresas (pymes). En nuestro plan estratégico planificamos nuestro crecimiento con dos segmentos de clientes principales: el primero, pymes; y el segundo, particulares de renta media-alta.
P. ¿Qué previsiones tiene la CAM sobre la evolución del mercado inmobiliario?
R. Vemos un horizonte positivo. El mercado inmobiliario responde a una serie de pautas, sociológicas y económicas, que no se agotan de un día para otro. El incremento de hogares monoparentales y el proceso de inmigración, sobre todo de europeos que buscan una segunda residencia, unido a la mejora de las comunicaciones (desde Alicante se puede ir y volver a Londres por 19 euros), ha situado la oferta en las posibilidades de muchísima gente. A eso hay que unir el crecimiento de población inmigrante (más de tres millones, en cifras oficiales), que son gente que demanda vivienda y da movilidad al mercado. Españoles que tenían viviendas de calidad media-baja han podido vender esas casas a los inmigrantes y con una financiación barata han mejorado su posición de vivienda. Todo eso, unido a unos tipos de interés bajos y la gran creación de empleo, dan recorrido al mercado inmobiliario.
P. ¿Y si suben los tipos de interés?
R. Yo creo que los tipos de interés no van a cambiar mucho. Estamos bajo el paraguas del euro y eso significa tipos de interés moderados. No vamos a ver dos dígitos nunca más. Veremos hasta el 4% o el 5%, pero eso es digerible sin mucha dificultad.
P. ¿Cuál es su política de comisiones?
R. Antes que cobrar por servicios intentamos abaratar los servicios. Nosotros apostamos por el autoservicio, a través del cajero, de Internet o de la banca telefónica. Ahí hemos hecho un esfuerzo tremendo. Hoy, más del 97% de las operaciones se realizan por autoservicio y son gratuitas para el cliente. En 2005 hemos registrado 135 millones de operaciones a través de la CAM Directo (Internet). Nosotros ligamos las comisiones al concepto de crédito. Cuando las tarjetas tienen crédito tienen comisiones para que compensen el riesgo. Ahora buscamos una relación de equilibrio y justa con el cliente para que la mayor parte de las transacciones tengan canales privilegiados para operar con la CAM, que siempre serán gratuitos.
La 'exploración' de nuevas vías de negocio
Pregunta. Además del inmobiliario, ¿qué sectores están en su punto de mira?
Respuesta. Hasta hoy hemos entrado en aquellas áreas de negocio donde no nos sentíamos fuertes y que observábamos con potencial. En materia de seguros nos aliamos con una empresa líder como Aegón, con la que hemos montado al 50% una sociedad de seguros de vida. El año pasado repetimos la experiencia en consumo, donde no éramos especialmente buenos, y buscamos un experto mundial como General Electric. Exploramos nuevas vías de negocio y, prueba de ello, es un crédito instantáneo que acabamos de sacar, a tipo cero, por Internet, donde el cliente, sin presentar documentación, puede disponer de un crédito para consumo al momento.
P. ¿Cómo van las inversiones en el Caribe con Sol Meliá?
R. La CAM está muy ligada al negocio turístico. Hemos intentado ayudar a quienes han contemplado la vía de crecimiento en el Caribe, incluso apoyándolos como socios. Estamos en ocho proyectos en el área caribeña y la experiencia está siendo muy exitosa.
P. ¿Considera fallida la inversión en Terra Mítica? ¿Canjearán deuda por acciones?
R. Con independencia de si el modelo de negocio fue más o menos acertado y al margen del sistema tan rápido de ejecución que incrementó los costes del parque, para nosotros Terra Mítica es un proyecto estratégico en la Comunidad Valenciana, por lo que supone de referencia para poner en mercado una zona turística muy importante (área de Benidorm) y por lo que supone de modelo de creación de empleo y de desestacionalización. Creemos que el parque debe pervivir, que tiene una razonable expectativa de viabilidad si se corrigen los desfases que ha podido tener hasta ahora. Tiene activos en cartera, sobre todo en el suelo, como para poder limpiar los problemas históricos consolidados en su balance. Nos gustaría que el parque pudiera arrancar prácticamente sin endeudamiento, centrarse en la actividad turística y generar beneficios. A partir de ahí, los socios institucionales (Generalitat, Bancaja y CAM) vamos a estar dispuestos a hacer lo que sea necesario y razonable para situar en posición de partida ese proyecto. Si eso supone capitalizar la deuda, creo que nuestro consejo estará de acuerdo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.